RABAT, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Comunicación y portavoz del Gobierno marroquí, Nabil Benabdallah, subrayó anoche que Marruecos está "amenazado a diario" y que estas menazas provienen principalmente de la situación que hay en los países vecinos y en el Sahel, que sirve de "territorio de repliegue par los terroristas internacionales".
En declaraciones a la cadena 2M que recoge hoy la agencia oficial MAP, el portavoz opina que las amenazas se dirigen también contra la experiencia democrática y las reformas iniciadas en el reino. "Lo que pasó en Casablanca afortunadamente fue limitado", afirmó el ministro, en referencia a la explosión registrada el domingo por la noche en un cibercafé de esta ciudad tras hacer estallar un hombre los explosivos que llevaba adosados a su cuerpo, hiriendo a cuatro personas. Según Benabdelá, "el objetivo era otro".
En la actualidad, afirmó el portavoz, "hay que seguir luchando contra el terrorismo con vigilancia y determinación para desmantelar las células terroristas, colaborar con las instancias de seguridad a escala internacional y solicitar la participación del ciudadano en esta lucha".
También es importante seguir, tanto con determinación como con serenidad, el proceso de modernización de Marruecos, país "de apertura, de tolerancia, de convivencia y de progreso bajo la dirección del rey Mohamed VI", añadió el portavoz.
Por otra parte, fuentes oficiales indicaron a la MAP que la explosión del domingo, en la que murió un presunto terrorista, y su cómplice resultó levemente herido, "fue accidental". Los dos sospechosos "se preparaban probablemente a cometer un acto criminal", según el director de Asuntos generales en la wilaya de la región de Gran Casablanca, Mojtar Bekali Kasemi.
La explosión ocurrió en un cibercafé situado en el barrio Sidi Mumen, cuando ambos sospechosos irrumpieron con el fin de consultar Internet, según explicó el responsable. Ante la negativa el dueño del cibercafé de permitirles tal operación, se produjo un altercado y el dueño del local decidió cerrar sus puertas para pedir ayuda.
Fue entonces, según la citada fuente, cuando se produjo la explosión, que destrozó el cuerpo de uno de los sospechosos, mientras que el segundo se deshizo de la carga explosiva que escondía en su ropa, antes de darse a la fuga con graves heridas en la cara, precisó el responsable marroquí.
El dueño del local, así como otras tres personas que estaban dentro del cibercafé resultaron heridas en la explosión. Según la versión de uno de los heridos, "dos individuos hicieron irrupción en el cibercafé, ocuparon dos lugares y se pusieron a teclear, lo que suscitó la reacción del dueño, que les invitó a comportarse adecuadamente".
Después, "uno de los dos individuos se alejó de su compañero, y enseguida se produjo la deflagración". "Creí en primer lugar que fue el ordenador que estalló. Asustado, me dirigí hacia la puerta para huir", dijo.