Más del 50 por ciento de la población no apoya las actuaciones de la presidenta filipina

Actualizado: lunes, 23 noviembre 2009 12:13

MANILA, 23 Nov. (Reuters/EP) -

La presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, a la que le quedan poco más de seis meses de mandato después de nueve años en el gobierno, provoca desconfianza en más de la mitad de sus ciudadanos, según la encuesta independiente realizada por Pulse Asia publicada este lunes.

En la encuesta, realizada del 22 al 30 de octubre, el 51 por ciento de los 1.800 encuestados se mostraron críticos con las actuaciones de Arroyo y el 52 por ciento dijo no confiar en ella, según explicó a Reuters el responsable del sondeo, Ronald Holmes.

"Cada vez que un gobierno está a punto de salir, nosotros esperamos una caída en su aprobación e índices de confianza", dijo Holmes, añadiendo que esta falta de apoyo puede perjudicar a los candidatos que apoye la presidenta para las próximas elecciones nacionales y locales de mayo.

Alrededor de 48 millones de filipinos tienen que elegir el próximo año a su presidente, vicepresidente, cerca de 300 legisladores de las dos cámaras del Parlamento y más de 17.000 gobiernos locales. Arroyo no puede optar a un segundo mandato.

El sucesor elegido por Arroyo, el ex secretario de Defensa Gilberto "Gibo" Teodoro, ha registrado peores valoraciones en la encuesta en comparación con los senadores de la oposición, Benigno "Noynoy" y Manuel Villar. Incluso, el ex presidente Joseph Estrada ha tenido mejor puntuación que la presidenta.

Homes explicó que la valoración de Arroyo se hizo justo unas semanas después de que Filipinas fuese maltratada por sucesivos tifones, lo que podría explicar la caída en su respaldo.

El índice de aprobación de la presidenta en octubre pasado disminuyó a 21 por ciento frente al 23% que tenía en agosto mientras que la desaprobación aumentó de un 43 a un 51 por ciento durante el mismo periodo.

Sus índices de confianza muestran un porcentaje similar que cae dos puntos porcentuales, del 21 al 19 por ciento, mientras que el índice de desconfianza aumenta 10 puntos porcentuales, del 42 por ciento en agosto de 2009. Pero el 29 por ciento no puede decir si desconfía o no de la presidenta.

"La última vez que la desaprobación y la desconfianza hacia el presidente superó el 50 por ciento fue en 2005, justo después de que la presidenta fuese relacionada con las acusaciones de fraude en las eleciones de 2004", dijo Holmes.

El portavoz de Arroyo, Gary Olivar, restó importancia a sus malos resultados, diciendo que ella debe ser valorada por su trabajo ético y sus logros. "Estos sondeos están basados en opiniones y nosotros no creemos que esto represente a un número significativo de filipinos", declaró el portavoz a los periodistas. "La presidenta se ha concentrado en proporcionar servicios sociales básicos para los más pobres de los pobres. Esto es más importante para la presidenta que su popularidad", añadió.