ATENAS 7 Sep. (Reuters/EP) -
Miles de griegos han salido a las calles de Salónica este sábado para protestar contra los recortes salariales y los despidos en el sector público, pese a la rebaja de impuestos sobre el combustible y del polémico 'impuesto solidario' anunciado por el primer ministro, Antonis Samaras.
El mandatario ha dado a conocer estas reducciones durante su intervención en el tradicional discurso sobre la situación económica dirigido a la nación después de cada verano, aunque los detalles se presentarán en octubre junto al proyecto de los presupuestos generales.
"El país se ha estabilizado y está entrando en la senda del crecimiento", ha asegurado Samaras, que ha puesto como objetivo la reducción del 42 al 32 por ciento el impuesto de la renta para las rentas más altas y la rebaja del impuesto de sociedades del 26 al 15 por ciento.
Además, otra de las medidas anunciadas es la reducción del popular impuesto sobre bienes inmuebles, denominado "impuesto solidario", para pagar prestaciones a parados y que debe abonar cualquier trabajador aunque haya trabajado un solo día durante el año anterior a la declaración de la renta.
Samaras, que lidera el partido de derecha Nueva Democracia, busca reducir la presión de los duros recortes impuestos por la 'troika' --Fondo Monetario Internacional, Banco Central Europeo y Comisión Europea-- a cambio del rescate que recibió el país.
"NO ES SUFICIENTE"
Sin embargo, horas después del discurso del mandatario, miles de griegos --tanto funcionarios como trabajadores del sector privado-- han salido a las calles de la ciudad de Salónica para protestar contra los recortes y los despidos.
"Esto son medias medidas y no son suficientes", ha asegurado el presidente del sindicato del sector privado GSEE, Yannis Panagopoulos. "La población griega, los trabajadores y pensionistas, nuestros desempleados están sufriendo", ha subrayado.
La Policía ha empleado gas lacrimógeno para dispersar a un grupo de manifestantes que ha intentado traspasar una zona acordonada, aunque no ha habido daños o enfrentamientos de importancia entre los asistentes y las fuerzas de seguridad.