La milicia 3R entrega a las autoridades centroafricanas a los responsables de la masacre en la región de Paoua

AMP.- R.Centroafricana.- Ascienden a 34 los muertos en un ataque de un grupo rebelde contra dos localidades en RCA
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Publicado: sábado, 25 mayo 2019 12:35

MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -

La milicia 3R ha entregado a las autoridades centroafricanas a los autores materiales de los ataques perpetrados esta semana en una serie de localidades de la región de Paoua, en el noroeste del país, que se saldaron con más de 50 muertos y han puesto en peligro el proceso de paz.

El Gobierno centroafricano atribuyó los ataques a una venganza de los milicianos de Retorno, Reclamación y Rehabilitación (3R) por la muerte de un peul y dio un plazo de 72 horas al jefe del grupo armado, Sidiki Abbas, para que entregara a los autores de la "masacre" y retirara las "barreras" en Paoua.

En un primer momento, Abbas, a quien las autoridades avisaron de que si no accedía a estas condiciones se arriesgaba a "ser considerado personalmente responsable", negó que el ataque fuera obra de 3R. "No podemos entregar culpables", dijo el mismo martes.

Sin embargo, el viernes el grupo armado anunció que había enviado un equipo de investigación a la región para esclarecer los hechos. El resultado fue la entrega de tres combatientes del 3R que, según los jefes de la milicia, actuaron por su cuenta.

"Hemos entregado a los responsables de este ataque --los que dispararon a los civiles-- a las autoridades nacionales y a la MINUSCA", dijo un portavoz insurgente, subrayando que no es la primera vez que el grupo armado actúa de esta manera. "Es nuestra costumbre", aseguró.

Interrogado sobre la retirada de las "barreras", contestó que 3R nunca las ha tenido. Sin embargo, afirmó que están dispuestos a hablar con el Gobierno y con la misión de Naciones Unidas en República Centroafricana (MINUSCA) "para ver cómo resolver todos los problemas" pendientes, informa la emisora francesa RFI.

La cadena local CNC, por su parte, ha precisado que los tres milicianos fueron entregados el viernes y trasladados ese mismo día a la capital centroafricana, Bangui. Este sábado comparecerán ante la Fiscalía, ha avanzado citando fuentes judiciales.

"PARECÍA QUE ESTABAN LLOVIENDO BALAS"

"Hombres con uniforme militar y armados con kalashnikovs llegaron a mi pueblo y pidieron ver a los líderes de la comunidad para celebrar una reunión", ha contado a Médicos Sin Fronteras (MSF) Alphonse, uno de los supervivientes, que resultó herido y fue atendido por la ONG.

"La población se reunió bajo un árbol de mangos. Entonces nos empezaron a atar. Rompieron mi camiseta para atarme los brazos. Nos apilaron unos encima de otros y empezaron a disparar. Parecía que estaban lloviendo balas", ha relatado Alphonse.

Muy poca gente sobrevivió al ataque del 3R. Algunos lo consiguieron fingiendo estar muertos. "Unos lograron escapar pero otros fueron rematados. Nuestros familiares nos llevaron en motos al hospital de Paoua", donde trabaja MSF y a donde llegó Alphonse, según cuenta. "Me dijeron que seguían encontrando cadáveres en el bosque", ha añadido.

De acuerdo con Naciones Unidas y con las autoridades centroafricanas, un total de 39 civiles murieron el pasado martes en las aldeas de Bohong, Ndjondjom y Koundjili, mientras que otros 15 fueron asesinados en incidentes similares que tuvieron lugar en Maikolo el día anterior.

MSF ha llamado la atención sobre el hecho de que se trata del primer ataque a gran escala después del periodo de relativa calma que ha seguido a la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno de República Centroafricana y 14 grupos armados, el pasado mes de febrero.

"CRÍMENES DE GUERRA"

"El Gobierno considera inaceptables estos actos de barbarie en un momento en el que ha elegido la paz, al igual que los grupos armados firmantes del acuerdo", dijeron las autoridades centroafricanas en un comunicado.

En la misma línea, la MINUSCA condenó la masacre y exhortó al 3R y al resto de grupos armados a "respetar estrictamente el Derecho Humanitario, la reconciliación y el acuerdo de paz".

En un paso más, la Unión Europea advirtió de que estos ataques "premeditados" podían constituir "crímenes de guerra y contra la Humanidad", además de suponer "una grave violación" del acuerdo de paz.

La directora en África Central del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Marie-Pierre Poirier, ha subrayado que este "brutal asesinato de civiles" es tan solo un reflejo de la violencia de los últimos años, que ha provocado que 2,9 millones de personas, la mitad de la población, necesite ayuda humanitaria.

"Las condiciones en el terreno siguen siendo extremadamente peligrosas para los niños", ha denunciado Poirier. En su caso, pueden ser objetivo directo de los grupos armados o sufrir los daños colaterales de ataques contra escuelas, hospitales y lugares de culto. Además, "se espera que unos 43.000 niños sufran desnutrición severa aguda este año".

CICLO DE VIOLENCIA

República Centroafricana (RCA) se vio inmerso en un conflicto que comenzó a final de 2013 y que enfrenta al Gobierno, a los antiguos rebeldes Séléka --principalmente musulmanes-- y las milicias de autodefensa 'antibalaka' --predominantemente cristianas--. RCA es la tercera mayor crisis humanitaria actual.

El presidente de RCA, Faustin-Archange Touaderá, anunció la composición de un gobierno de unidad a raíz del acuerdo de paz, que preveía el cese inmediato de las hostilidades, un proceso de desarme y reinserción de los milicianos y la creación de un Ejecutivo inclusivo.

La milicia 3R, que firmó el citado acuerdo de paz, surgió a final de 2015 para proteger a la minoría peul --integrada mayoritariamente por musulmanes-- de los ataques 'antibalaka'.