Milicianos suníes asaltan varias comisarías de Policía en Irak

FALUYA (IRAK), 1 Ene. (Reuters/EP) -

   Milicianos suníes han irrumpido este miércoles en varias comisarías de Policía en la provincia de Anbar, situada en el oeste del país y escenario de intensos enfrentamientos en los últimos días a raíz del desalojo de un campamento de protesta.

   Los ataques han sido perpetrados contra comisarías de Faluya, Ramadi y Tarmiya y se han saldado con el robo de armamento y la liberación de un número indeterminado de presos.

   Un agente ha relatado a Reuters el asalto de un "gran número" de hombres armados a tres centros de Faluya. "Nos obligaron a todos los policías a irnos sin nuestras armas si queríamos conservar nuestras vidas. Todos nos fuimos, no queríamos morir para nada", ha explicado.

   Los asaltantes se hicieron posteriormente con el control de un edificio oficial cercano y apostaron francotiradores en su tejado para impedir a las fuerzas de seguridad acercarse a la zona.

   Los enfrentamientos se han extendido también a Ramadi, donde con el de este miércoles ya son tres los días consecutivos de choques entre hombres armados y fuerzas de seguridad. Milicianos a bordo de vehículos armados asaltaron varias instalaciones policiales.

   Por otra parte, al menos cuatro agentes han muerto y otros 12 han resultado heridos por un ataque lanzado contra una comisaría en la ciudad de Tarmiya, de mayoría suní, según un balance facilitado por la Policía.

   Los incidentes de este miércoles ponen de manifiesto la escalada de tensiones entre los suníes de Anbar y el Gobierno, controlado por el chií Nuri al Maliki. Los enfrentamientos se han recrudecido a raíz del deselojo el lunes de un campamento de protesta con el que la comunidad suní denunciaba su supuesta marginación.

   Pese a que Al Maliki había dicho que la Policía civil podía encargarse del control de la provincia y proceder a la retirada del Ejército, finalmente ha dado marcha atrás a este repliegue por petición del gobernador de Anbar, Ahmed Jalaf, según ha informado la oficina de este último.

   El gobernador "ha pedido al primer ministro que mantenga al Ejército en Anbar porque los milicianos de Al Qaeda han logrado entrar y controlan algunas zonas de la provincia".