MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Inteligencia iraní, Heidar Moslehi, ha asegurado que Irán es inmune a las amenazas terroristas y ha subrayado que esto es así gracias a la observancia de los aparatos de Inteligencia del país, según ha informado la cadena de televisión Press TV.
"La gente puede estar segura de que (los terroristas) no pueden hacer daño a la seguridad del país", ha dicho Moslehi durante su visita a la provincia de Kermanshah (oeste), según recoge la agencia de noticias iraní IRNA. Además, ha apuntado que las estrictas medidas de seguridad existentes en las zonas fronterizas no dejan lugar para la preocupación sobre las posibles amenazas a la seguridad interna.
"Hay grupos terroristas, pero, gracias al poderoso servicio de Inteligencia, han sido desposeídos de la posibilidad de llevar a cabo una operación extendida y destructiva", ha agregado Moslehi.
Por último, ha recalcado que la presencia del Ejército en las fronteras y su trabajo cercano con el Ministerio que encabeza han provocado un nivel "óptimo" del nivel de la seguridad en las fronteras, especialmente en el oeste del país.
La provincia de Kermanshah ha sido objetivo de múltiples operaciones de infiltración por parte de las organizaciones Mujahedin e Jalq Organization (MKO) y el Partido por una Vida Libre del Kurdistán (PJAK), que operan desde Irak.
El MKO huyó a Irak en los años ochenta, donde contaba con el apoyo del ex presidente iraquí Saddam Hussein, y se ubicó en el Campo Ashraf, en la provincia de Diyala (este), cerca de la frontera con Irán. Cerca de 3.000 personas residen a día de hoy en ese campamento, desde el que parten miembros del MKO hacia Irán para realizar tareas de espionaje y ataques terroristas.
El MKO es considerado una organización terrorista por gran parte de la comunidad internacional y ha llevado a cabo ataques terroristas contra iraníes e iraquíes. Teherán ha solicitado en reiteradas ocasiones a Bagdad que expulse a la organización de su territorio, pero, según estas informaciones, Washington habría presionado al Gobierno iraquí para evitar esta expulsión.
Por su parte, el PJAK es una escisión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). La Guardia Revolucionaria iraní ha lanzado múltiples operaciones contra el PJAk para "estabilizar" el área.
El general de las fuerzas de tierra de la Guardia Revolucionaria iraní, Abdulá Araqi, ha afirmado que las fuerzas del PJAK se han rendido y han abandonado el territorio nacional a consecuencia de las operaciones militares desplegadas por Irán durante el verano.