Discuten con su homólogo ucraniano el plan de paz de Kiev y espera dar luz verde a varios fondos fiduciarios para canalizar ayuda a Ucrania
BRUSELAS, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Exteriores de la OTAN mantendrán este miércoles toda la cooperación con Rusia suspendida por su papel en el conflicto en Ucrania pero dejarán abierto el canal de diálogo a través del Consejo OTAN-Rusia, según han avanzado fuentes aliadas.
Los Veintiocho no tomarán decisiones todavía de cara a replantearse las relaciones a largo plazo con Rusia a raíz de la crisis en Ucrania en su reunión para preparar la cumbre de los jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN a principios de septiembre en Gales (Reino Unido), que decidirán esta cuestión, al igual que las posibles medidas para reforzar la defensa colectiva más robustas.
Los ministros de Exteriores discutirán además el miércoles la situación en Ucrania y el plan de paz de Kiev para pacificar la situación en el sureste del país con el nuevo ministro de Exteriores ucraniano, Pavlo Klimkin, y se espera que aprueben la idea de crear varios fondos fiduciarios para ayudar a canalizar la ayuda a Ucrania, muy centrada en las reformas de sus Fuerzas Armadas. Los fondos no podrá utilizarlos Kiev en ningún caso para adquirir armamento, según han precisado fuentes diplomáticas.
La reunión de los aliados para preparar la cumbre, a la que acudirá el secretario de Estado de Exteriores, Gonzalo de Benito, arranca con una cena este martes, en la que ejerce de anfitrión el ministro de Exteriores británico, William Hague. La cena estará centrada "en principio" exclusivamente en la política de puertas a abierta de la OTAN a nuevos miembros, algo que deberán decidir los jefes aliados. De momento "no hay consenso" para invitar a Montenegro y Georgia a la Alianza, los dos países con más probabilidades a priori de los cuatro aspirantes, junto con Bosnia y Herzegovina y la Antigua República Yugoslava de Macedonia.
Los Veintiocho también discutirán la posibilidad de aprobar una declaración sobre las relaciones trasatlánticas en la cumbre, aunque todavía no está claro que se vaya a aprobar, a la espera de cómo se articula el compromiso de los aliados europeos para frenar la caída de los presupuestos en defensa y elevar el gasto conforme se apuntale la recuperación económica. Estados Unidos, que lleva meses exigiendo un mayor esfuerzo a los europeos para contribuir a su propia defensa, quiere un compromiso decidido suyo para destinar el 2% del PIB a defensa, el objetivo que marca la OTAN.
España, que destinó el 0,9% de su PIB en 2013 a defensa, defiende que no se puede tener en cuenta sólo este dato y que hay que valorar también las capacidades nacionales que aportan los países a las operaciones de la OTAN, pero también a la Unión Europea y la ONU para contribuir a la seguridad global, según fuentes diplomáticas.
AYUDAR A CONSOLIDAR FUERZAS EN TERCEROS PAÍSES E IRAK
Los ministros también esperan avanzar en un plan para que la OTAN contribuya al desarrollo de las capacidades de defensa de terceros países, incluidos países en conflicto como Libia, dado que ello redundaría en beneficio de su propia seguridad y que es otra de las propuestas que se espera que sellen los jefes aliados. Los países deben detallar todavía en los próximos meses los países que potencialmente se podrían beneficiar de la ayuda.
Se espera que el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, informe a sus colegas de su reciente visita a Irak en plena escalada por el avance del grupo terrorista del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), que genera una gran preocupación entre los aliados y que ha afectado de forma notable a Turquía tras el secuestro de 80 ciudadanos turcos, incluido el cónsul general del país en Mosul por el ISIS.
Estados Unidos ha anunciado el envío de hasta 300 asesores militares para ayudar al Gobierno iraquí a frenar el avance de ISIS, pero de momento ha evitado comprometerse con ataques aéreos contra sus posiciones como pedía el Gobierno de Bagdad, al que Washington ha pedido que forje la unidad necesaria entre comunidades en el próximo Gobierno iraquí.
La OTAN descarta un papel en Irak y ha aclarado que el Gobierno de Bagdad no ha pedido asistencia a la Alianza para ayudar a sus fuerzas en todo caso, según fuentes aliadas.
LUZ VERDE AL PLAN OPERATIVO PARA LA NUEVA MISIÓN EN AFGANISTÁN
Los ministros de Exteriores de la OTAN también tiene previsto dar luz verde este miércoles al plan operativo de la nueva misión de entrenamiento, asesoramiento y asistencia de las fuerzas afganas que lanzarán, a partir de enero de 2015, si el nuevo presidente afgano que salga de las urnas firma el acuerdo de seguridad bilateral con Estados Unidos y el acuerdo sobre el estatus de la fuerza con la OTAN, para dar cobertura a las tropas que permanezcan sobre el terreno.
La fuerza, bautizada 'Apoyo Resuelto', contará con unos 12.000 efectivos, incluidos unos 8.000 estadounidenses. Los aliados esperan concretar sus contribuciones en una conferencia de generación de fuerzas a principios de julio, aunque algunos aliados ya han venido dando indicaciones al respecto. Así por ejemplo, España dejará unos "250-300" efectivos en el país si se materializa la misión.
Los Veintiocho también darán luz verde a otro informe preparatorio para allanar nuevas propuestas que deben sellar los jefes aliados como es el plan para revitalizar y hacer operativa la estrategia de seguridad marítima de la Alianza Atlántica, para garantizar en concreto que las agrupaciones navales permanentes del organismo cuentan con suficientes medios para llevar a cabo misiones de alta intensidad y reforzar los entrenamientos de las fuerzas navales aliadas y su capacidad de actuar conjuntamente.
