MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, defendió hoy en la inauguración de la reunión de 'Amigos de la Constitución' la búsqueda de un texto mejorado, en el que se introduzcan "nuevas disposiciones" para salir de la crisis constitucional en lugar de "despiezar" el texto, y sugirió que para lograr un consenso se recurra a "mecanismo de integración diferenciada" en los que los países que quieran avanzar más rápido puedan hacerlo.
"A ojos de España resulta preferible abordar la superación de la actual crisis de la Unión con una propuesta audaz, que no temeraria, que hacerlo con una propuesta de mínimos que inevitablemente nos llevaría a un acuerdo igualmente de mínimos que la realidad demostraría pronto insuficiente", aseveró, descartando que la "única manera de buscar una salida del atolladero constitucional sea desmontar la Constitución para trocearla".
Según Moratinos, en los dos años de periodo de reflexión "nadie nos ha presentado una opción mejor para el futuro de Europa" que el actual Tratado Constitucional. En este sentido, subrayó que son ya 18 los países que han ratificado la Carta Magna, nueve de ellos después del 'no' en Francia y Países Bajos, donde se expresó "legítimamente" la voz popular.
Las propuestas que habido hasta ahora, añadió el ministro, "aspiran a salvaguardar, en teoría, lo que se entiende por la 'sustancia' del texto". Esto plantea el problema, añadió, de definir qué es la sustancia del mismo puesto que "no todo el mundo entiende de la misma manera ese concepto". En este sentido, rechazó que la sustancia sean sólo las disposiciones para la reforma de las instituciones europeas para que la UE "sea plenamente operativa en el siglo XXI".
Para el ministro, "el 'impasse' en que nos encontramos nos ofrece la oportunidad de completar" el texto que elaboró la Convención. Así, defendió la inclusión de "nuevas disposiciones que lo completaran, atendiendo a las preocupaciones de los ciudadanos". Se trataría, añadió, "de una propuesta ambiciosa, nada sencilla de llevar a término, pero tendría al menos la virtud de mostrar a los ciudadanos que les hemos escuchados".
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En este sentido, propuso introducir disposiciones como "la inclusión en el Tratado de los criterios para la adhesión de nuevos Estados miembros"; "el perfeccionamiento de los mecanismos de control de la subsidiariedad y de la calidad de la legislación de la Unión"; "potenciación de una política europea de inmigración"; "el desarrollo de una política energética"; "la lucha contra el cambio climático"; "la previsión de una mayor coordinación de las políticas económicas europeas"; "el desarrollo de un espacio social europeo" o "el reforzamiento de la política europea de seguridad y defensa".
"El logro de un consenso sobre estos temas u otros que se consideraran de interés, no sería una tarea fácil", admitió Moratinos, que consideró que "es previsible, en este contexto, que fuera preciso el recurso a mecanismos de integración diferenciada o de cooperación reforzada para obtener un acuerdo", si bien no profundizó en esta cuestión.
El ministro quiso hacer hincapié también en su intervención en el hecho de que los participantes en la reunión de hoy en Madrid --los 18 que han ratificado junto a Portugal e Irlanda-- son "amigos a los que les une el afán de lograr una Europa mejor" y que desean que su "voz sea oída en el debate sobre el futuro de Europa". Estos países, indicó, son también "conscientes de que las presentes dificultades para su ratificación nos llevarán muy probablemente a tener que negociar su modificación".
Llegados a este caso, aseguró Moratinos, "España sería partidaria de buscar el consenso más bien completando el Tratado que despiezándolo". En todo caso, concluyó "es nuestra firme voluntad ayudar con absoluta lealtad y sinceridad a la Presidencia alemana a encontrar un consenso sobre el proceso de reforma de la Unión para alcanzar un acuerdo satisfactorio, en el plazo más breve".
