La autora presenta el libro 'La isla bajo el mar', una revisión de la esclavitud en Santo Domingo durante el siglo XVIII
MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
La escritora chilena Isabel Allende destacó hoy el papel de la mujer en el avance económico de los países empobrecidos y en vías de desarrollo, donde en los últimos años ha crecido la concesión de microcréditos "a grupos de cinco o seis mujeres" en detrimento de sus maridos, quienes, según la autora, "se gastarían estas subvenciones en bicicletas".
En la presentación del libro 'La isla bajo el mar' (Plaza & Janés, 2009), celebrada en la Casa de América de Madrid y conducida por la periodista Carme Chaparro, Allende afirmó que "los hombres aportan dinero en aquellos lugares con los que están relacionados directamente, por aparentar". En cambio, añadió, las mujeres "invierten donde toca".
Para ilustrar su opinión, Allende aseguró que la labor de las mujeres en los estados industrializados "no es muy distinta" a la que realizan en los países empobrecidos. "Las mujeres manejan el 40 por ciento del dinero y son las que siguen teniendo la plata en estos momentos de crisis, ya que ellas invierten sin tener en cuenta su prestigio social".
Asimismo, la autora subrayó que en los últimos años ha surgido un "movimiento de jóvenes idealistas" con ganas de cambiar el mundo y eliminar las diferencias jurídicas y sociales entre hombres y mujeres. "Y a este movimiento se han unido, además, muchos chicos", agregó.
ECOS DE LA ESCLAVITUD
Allende presentó hoy su nueva novela, 'La isla bajo el mar', en la que retoma su discurso comprometido para narrar la historia de Zarité, una mulata de nueve años que es vendida como esclava a un terrateniente francés en Santo Domingo y que lucha a lo largo de toda su vida para recuperar la libertad en una plantación de azúcar durante el siglo XVIII.
La escritora chilena reconoció que el proceso de investigación para realizar esta novela fue "muy duro", ya que vislumbró "hasta qué punto" pueden llegar las "atrocidades" de los seres humanos. "Durante la investigación vi cosas horrorosas, vi cómo los hombres pueden deshumanizar a sus hermanos sin tener que rendirle cuentas a nadie. Es lo que pasa en las guerras y lo que ocurre muchas veces en nuestra vida cotidiana", explicó.
