El nuevo secretario de Defensa norteamericano jura el cargo en una ceremonia privada celebrada en la Casa Blanca

Actualizado: lunes, 18 diciembre 2006 19:05


NUEVA YORK, 18 Dic. (EUROPA PRESS/Carlos López) -

El nuevo secretario de Defensa norteamericano, Robert Gates, juró hoy el cargo en una ceremonia privada que tuvo lugar en la Casa Blanca y que posteriormente se repetirá en la sede del Pentágono, abriendo de esta manera una nueva etapa para la cartera que hasta ahora estuvo en manos de Donald H. Rumsfeld.

Gates, que sirvió durante 26 años en la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), fue nominado el pasado 8 de noviembre por el presidente estadounidense, George W. Bush, para ocupar el cargo de su predecesor quien presentara su dimisión horas antes tras la debacle electoral republicana a consecuencia de la política en Irak.

Gates fue confirmado unánimemente por el Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos el pasado 5 de diciembre, siendo confirmado definitivamente en el cargo por el pleno de la Cámara Alta al día siguiente con un aplastante apoyo de demócratas y republicanos en lo que se interpreta el nuevo giro hacia el consenso de Bush.

El nuevo secretario de Defensa se incorporará al cargo con la importante tarea de readaptar la estrategia militar desarrollada hasta el momento por Estados Unidos, y que le ha costado el puesto a Rumsfeld. Gates, de 63 años de edad, ha participado como miembro del Grupo de Estudio para Irak, liderado por James A. Baker III.

Dicho estudio sostiene que Estados Unidos debería intensificar su ofensiva diplomática en la región e integrar a los militares en equipos de formación dentro del Ejército iraquí con el objetivo de acelerar el proceso de preparación de sus militares de cara a la retirada de las tropas del país árabe que debería iniciarse en 2008.

Gates anunció durante su audiencia en el Senado que viajaría pronto a Irak donde consultaría con el mando en el terreno sobre la mejor estrategia a seguir. Además de Irak y la guerra en Afganistán, Gates deberá estudiar la posibilidad de incrementar el número de miembros que integran el Ejército o, como su predecesor en el cargo, mantener el número actual.