OCDE.- Un total de 17 países piden a la OCDE revisar la 'lista negra' de paraísos fiscales

Actualizado: martes, 21 octubre 2008 18:49

París y Berlín capitanean una cruzada contra los "agujeros financieros"

PARIS, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un total de 17 países reunidos hoy en en el Ministerio de Economía francés con el objetivo de analizar los mejores métodos para luchar contra los paraísos fiscales han pedido a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) revisar su 'lista negra' de paraísos fiscales de aquí a mediados de 2009 para ampliarla a aquellos Estados que cuentan con un secreto bancario excesivo.

Esa lista tiene ahora sólo tres nombres, Mónaco, Andorra y Liechtenstein, pero el ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrueck, copatrocinador junto a París del encuentro, quiere incluir a Suiza, país que ha estado ausente de la reunión como Estados Unidos, Austria y Luxemburgo.

"Suiza ha hecho progresos, pero tenemos que ir mucho más lejos", dijo por su parte el titular galo de Presupuestos, Eric Woerth, para quien la reunión ha permitido relanzar en el plano político la lucha internacional contra los paraísos fiscales.

La OCDE, que ha sido el organismo encargado por el G-8 para hacer un seguimiento del problema de los paraísos fiscales, elaborará de aquí al próximo mes de mayo de 2009 una nueva 'lista negra' de "predadores fiscales" en palabras del ministro galo de Presupuestos, y a partir de ahí se decidirá si se toman represalias con los Estados poco colaboradores.

"No se puede decir que se quiere la moralización del capitalismo financiero sin luchar de manera extraordinariamente firme contra los agujeros financieros que son los paraísos fiscales y que probablemente aceleraron la crisis", lanzó Woerth en la Asamblea nacional francesa.

Además, de ejercer una mayor presión sobre los paraísos fiscales, en la reunión de hoy se acordó igualmente crear una 'lista verde' para los países que hagan esfuerzos y se muestren más colaboradores. Se quiere asimismo extender la directiva comunitaria de ahorro a otros productos financieros, para que así se puedan intercambiar informaciones entre Estados, y compilar las mejores técnicas aplicadas por los diferentes países en la lucha contra la evasión fiscal.

"Se han dado respuestas muy concretas", resumió el ministro francés, quien dejó claro que en lo que concierne a los bancos galos, éstos deberán aclarar el conjunto de su relación con los paraísos fiscales, tal y como anunció el presidente Nicolas Sarkozy, quien dejó claro que quienes se beneficien de ayudas públicas deberá aclarar su relación con los paraísos fiscales.

Convocada tras el escándalo de la evasión financiera de Liechtenstein el pasado mes de febrero, la cita de los ministros de la OCDE tuvo hoy una nueva dimensión a la luz de la actual crisis financiera internacional y coincide con un momento en el que Francia batalla para "moralizar" el capitalismo.

En la misma línea se expresa la OCDE para quien, cuando los bancos están siendo recapitalizados de manera masiva parece igualmente "inaceptable" permitir que sobreviva un sistema que contribuye al fraude a través de sus filiales en los paraísos fiscales.

Francia valora en entre 30.000 y 40.000 millones de euros las pérdidas de presupuesto del Estado ligadas al fraude fiscal vía los centros 'offshore' mientras que Alemania da una cifra de unos 10.000 millones de euros anuales.

Conscientes de que ninguna sanción puede decidirse sin la presencia de Estados Unidos, demasiado implicado ahora en la campaña electoral, París y Berlín se han contentado con pedir a la OCDE un nuevo listado de paraísos fiscales.

No obstante, en la reunión se insistió ante los socios europeos en la necesidad de endurecer la directiva sobre la fiscalidad del ahorro, asunto que figurará en la agenda del Ecofin de diciembre.

Negociado durante diez años, este texto no ha puesto fin al secreto bancario en el seno de la UE debido a la oposición de Luxemburgo y Austria. A ello hay que añadir que la legislación comunitaria tiene lagunas importantes porque sólo concierne a las personas físicas y no cubre todos los productos financieros.