NUEVA YORK, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Timor Oriental, José Ramos Horta, agradeció los esfuerzos de Naciones Unidas por llevar la paz y la estabilidad en el país del sureste asiático, pero pidió al organismo internacional que amplíe su compromiso para ayudar a fortalecer las instituciones nacionales y asegurar las bases de la democracia.
Ramos Horta reconoció, durante su participación en la 62 Asamblea General de la ONU, que la presencia de la Misión Integrada de Naciones Unidas para Timor Oriental (UNMIT) tras la violencia desencadenada en los meses de abril y mayo permitió al país alcanzar "progresos significativos".
El presidente timorense también aseguró que las elecciones presidenciales y legislativas celebradas a principios de este año se desarrollaron en un clima ampliamente libre de violencia o irregularidades y, además, han comenzado las reformas en el ámbito de la seguridad.
Sin embargo, Ramos Horta consideró que los recientes casos de violencia protagonizados por los seguidores del partido rival --Fretilin-- demuestran que la "relativa tranquilidad en el país es una tranquilidad precaria".
Los acontecimientos del último año fueron "una crisis del propio hacer" de los timorenses y de los que deben asumir su "total responsabilidad". Aún así, Ramos Horta expresó su esperanza en que Naciones Unidas considerará un "compromiso a largo plazo" con Timor Oriental para "estabilizar la situación, cimentar las instituciones de la nación y consolidar la paz y la democracia".
"Mientras la situación progrese, esperamos que la Comisión de Construcción de la Paz considerará colocar Timor Oriental en su agenda para que continúe la UNMIT", añadió el presidente.