JERUSALÉN 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La ONG Amnistía Internacional condenó hoy el asesinato ayer de ocho civiles israelíes, cuatro de ellos niños, en el tiroteo en una escuela judía (yeshivá) en Jerusalén, pero pidió a Israel que no responda con ataques que pongan en peligro a civiles palestinos.
"Condenamos absolutamente este ataque deliberado contra civiles israelíes como un abuso burdo del derecho internacional. Exigimos que todos los grupos armados que inmediatamente dejen de atacar a civiles", señaló Malcolm Smart, director de Amnistía Internacional para Oriente Próximo y el norte de África.
Los ocho estudiantes fueron tiroteados en la biblioteca de una escuela judía por parte de un miliciano palestino de Jerusalén Este y que fue abatido poco después. Aunque en un principio un grupo autodenominado Batallones para la Libertad de Galilea- los Mártires de Imad Mughniyeh, en referencia al dirigente de Hezbolá asesinado el mes pasado, reivindicó esta mañana el atentado, más tarde Hamás se responsabilizó del mismo.
A pesar de todo, la ONG hizo un llamamiento al Gobierno israelí para que no responda a este ataque con medidas que puedan poner en peligro a civiles palestinos. "Las vidas de los civiles palestinos, que no son responsables del ataque de ayer en Jerusalén, no deben ponerse en riesgo, y la población de los territorios ocupados no debe ser sometida al castigo de las fuerzas israelíes", añadió Smart.
Asimismo, subrayó que "las autoridades israelíes deben adherirse a los estándares del derecho internacional y los Derechos Humanos en cualquier acción que tome como respuesta al ataque de anoche, aunque el ataque demostrara una indiferencia a los principios más fundamentales". En su opinión, "los abusos de un lado, sin importar lo graves que sean, no pueden nunca justificar los abusos de la otra parte".