O.Próximo.- Olmert reconoce que no hay una solución rápida y definitiva para acabar con los lanzamientos de Qassam

Actualizado: martes, 22 mayo 2007 14:01

JERUSALÉN, 22 May. (EP/AP) -

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, reconoció hoy que no tiene una rápida solución para poner fin al lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza, después de que ayer perdiera la vida una mujer por el impacto de uno de esos misiles en Sderot, en la primera muerte de un israelí a manos de palestinos en seis meses, por la que Israel ha prometido una respuesta dura.

Responsables del Ministerio de Defensa aseguraron que el Ejército reforzará sus ataques contra milicianos palestinos, advirtiendo de que los máximos líderes del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), incluyendo el primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, pueden estar en peligro.

"Sólo son terroristas con trajes. Eso no les exculpa", aseguró el viceministro de Defensa, Ephraim Sneh, a Israel Radio. "No hay uno sólo en el círculo de liderazgo y comando de Hamás que tenga inmunidad", agregó.

Por su parte, Olmert se dirigió a los habitantes de Sderot por segunda vez en lo que va de semana para intentar llevar algo de calma, aunque reconoció que no existe una solución definitiva para acabar con el lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza.

"Continuaremos invirtiendo y continuaremos protegiéndoos, pero vosotros, por supuesto, sabéis que no hay una solución inmediata para los Qassams y no hay una solución definitiva", dijo Olmert, según un comunicado hecho público por su oficina.

Asimismo, prometió que acelerará el proceso para reforzar las casas de cara a protegerlas frente a los ataques. "Entiendo vuestra rabia, frustración y dificultados", afirmó el primer ministro.

El ataque de ayer tuvo lugar mientras la ministra israelí de Asuntos Exteriores, Tzipi Livni, se reunía con el alto representante para la Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Javier Solana, en Sderot.

Los residentes de la localidad israelí se manifestaron en el exterior del edificio donde tuvo lugar el encuentro entre Solana y Livni, quemando neumáticos y acusando al Gobierno israelí de fracasar en su protección. Por su parte, en una rueda de prensa conjunta, Solana denunció la violencia y Livni hizo un llamamiento a que una acción internacional presione "a los terroristas y al Gobierno palestino".