El ministro califica de positiva la descentralización en España y recuerda que se ha hecho siempre "dentro de la unidad" del país CHISINAU, 8 Oct. (del enviado especial de EUROPA PRESS, Angel Expósito) -
El presidente durante este 2007 de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Miguel Angel Moratinos, afirmó hoy en Chisinau que el modelo autonómico español puede servir de "inspiración" a las autoridades moldavas a la hora de buscar una solución al conflicto separatista de Transnistria.
Así se pronunció en rueda de prensa con el ministro moldavo de Exteriores, Andrei Stratan, en la que indicó que había explicado a las autoridades moldavas el sistema autonómico español ya que, dijo, puede ser motivo de "inspiración" e incluso de "admiración" porque "funciona".
Moratinos calificó de "positivo" el modelo de descentralización español y subrayó que ha dado buenos resultados con los Estatutos de Autonomía, eso sí, remarcó, "siempre dentro de la unidad de España".
El ministro español, que hoy se encuentra en Moldavia para abordar como presidente de la OSCE el problema separatista de Transnistria, que se autoproclamó independiente en 1990, precisó no obstante que tanto él como las autoridades moldavas tienen claro que cada problema territorial tiene "su propia experiencia, historia y demografía", por lo que cada una de sus soluciones puede servir como "inspiración" en otros conflictos, pero nada más.
Moratinos recomendó además no hacer comparaciones entre el problema transnistrio con otros que afectan al territorio OSCE, como es el caso de Kosovo, Osetia del Sur y Abjazia.
El ministro moldavo indicó por su parte que su gobierno tiene especial interés en que en la próxima cumbre ministerial de la OSCE, que tendrá lugar a finales de noviembre en Madrid, se plantee el futuro estatuto de Transnistria.
Según Moratinos, en Madrid se deberían adoptar los principios generales para la solución del problema aceptados por todas las partes con el fin de encontrar una solución política que mantenga la integridad territorial a la vez que se profundice en el acercamiento a la UE.
Previa a la reunión ministerial de Madrid, se celebrará en Viena el próximo 11 de octubre un encuentro sobre el problema transnistrio en el que se pasará del sistema de negociación vigente hasta la fecha entre Ucrania, Rusia, la OSCE, más la UE y Estados Unidos como observadores, a un sistema de 5+2, esto es, Ucrania, Rusia, la OSCE, Moldavia y Transnistria, junto a los dos observadores.
El ministro moldavo confió en que la intervención de la UE y otros agentes internacionales dé con una solución definitiva al conflicto de Transnitria.
HACIENDO HISTORIA EN LA RELACIÓN BILATERAL
Con motivo de la visita de Moratinos a Moldavia, la primera de un ministro español de Exteriores a la república ex soviética, ambos gobiernos aprovecharon para firmar un tratado para evitar la doble imposición y la evasión fiscal.
Por otra parte, afirmó que los actuales gobiernos español y moldavo están "haciendo historia" en las relaciones entre ambos países, que abrirán embajadas en breve tanto en Madrid como en Chisinau.
Antes de la rueda de prensa, Moratinos se entrevistó con el presidente moldavo, Vladimir Voronin, y el primer ministro, Vasile Tarlev. Por la tarde, tenía previsto desplazarse a Tiraspol, en Transnitria, para verse con el líder transnistrio, Igor Smirnov y el negociador principal, Valery Litskai.
Los conflictos étnicos entre las comunidades rumana y ruso ucraniana en Transnistria estallaron tras la decisión de la República Socialista de Moldavia en 1989 de declarar como único idioma estatal el moldavo a partir de la grafía rumana, en lugar de la cirílica.
En 1992 estalló una guerra civil que dejó 1.500 muertos y que se saldó con la victoria de los separatistas, apoyados por el Ejército ruso. Como consecuencia de este enfrentamiento, las autoridades moldavas perdieron el control de Transnistria, donde todavía Rusia mantiene presencia militar.
Moldavia es el país más pobre de Europa, según datos de la UE y tiene una renta per cápita similar a la de Bolivia. La colonia de moldavos en España ronda, según los cálculos oficiales, las 10.000 personas, mientras que los españoles en Moldavia se reducen a siete.
Una de las mayores preocupaciones de la OSCE en este país tiene que ver con la violencia doméstica, ya que según datos de este organismo internacional, una de cada cuatro mujeres moldavas lo sufre, así como con las redes que trafican con mujeres para obligarlas a ejercer la prostitución.
