BRUSELAS, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha reclamado este jueves la liberación "inmediata" del primer ministro libio, Alí Zeidan, que ha sido detenido por el antiguo grupo rebelde la Sala de los Revolucionarios Libios y ha subrayado la importancia de que la estabilidad y el Estado de Derecho en Libia se respeten "plenamente".
"Estoy siguiendo los acontecimientos muy de cerca y con gran preocupación. Es importante que la situación se aclare lo antes posible. Si se confirma que el primer ministro Zeidan ha sido secuestrado, pido su liberación inmediata", ha manifestado el danés en rueda de prensa. "Es de máxima importancia que la estabilidad y el Estado de Derecho se respeten plenamente en Libia", ha subrayado.
El Gobierno ha informado este jueves un comunicado de que Zeidan ha sido detenido por la Sala de los Revolucionarios Libios, un antiguo grupo rebelde que trabaja para el Ministerio del Interior para garantizar la seguridad en la capital, Trípoli.
La Sala de los Revolucionarios Libios ha reivindicado la captura y ha asegurado que ha actuado "por orden de la Fiscalía". No obstante, el fiscal general de Libia, Abdelqader Radwan, ha negado que el Ministerio Público haya emitido una orden de arresto contra Zeidan, según ha informado Al Arabiya.
Los captores han asegurado también que la detención de Zeidan es una respuesta a la operación llevada a cabo por las fuerzas especiales de Estados Unidos en Trípoli para detener al supuesto líder de Al Qaeda Nazih al Raqi, alias Abu Anas al Libi, y han anunciado que seguirán persiguiendo a "todos" los que ayudaron en la captura de Al Libi.
Libia vive una gran inestabilidad desde la caída del régimen de Muamar Gadafi, el 20 de octubre de 2011, tras la intervención militar de la OTAN, debido, sobre todo, a la negativa de las milicias que ayudaron a derrocarlo a entregar las armas y unirse a las fuerzas regulares.
PETICIÓN DE AYUDA A LA OTAN
El secretario general de la OTAN ha explicado que los aliados todavía estudian la petición de ayuda cursada en mayo a la Alianza Atlántica por las autoridades libias para que les asistan para "construir o reforzar su sector de seguridad".
"Todavía lo estamos analizando", ha explicado el danés. "Compete a las autoridades libias decidir si quieren asistencia externa para ayudar a reconstruir un sector de seguridad creíble en Libia", ha recalcado, preguntado si la OTAN no debería haber actuado antes a la luz de los desafíos de seguridad sobre el terreno.
El danés ha recordado que han actuado "rápido" dado que poco después de recibir la petición de ayuda en mayo enviaron un equipo de expertos sobre el terreno a Trípoli para ver en más detalle la petición y que "desde el principio" han dejado claro a las autoridades del país que los aliados están "listos para ofrecer asistencia si se solicita".
OTAN ADMITE PROBLEMAS EN LIBIA TRAS SU INTERVENCIÓN
Rasmussen ha admitido que "obviamente hay problemas en Libia en lo que se refiere a la seguridad", dejando claro que los aliados considerarán "como la situación de seguridad impactará en cualquier posible asistencia de la OTAN".
"Y por supuesto tendremos que tener en cuenta los recientes acontecimientos cuando respondamos, pero creo que está claro para todo el mundo que algo hay que hacer para garantizar la estabilidad en Libia", ha apostillado el danés, que hace meses admitió que una de las opciones que se estudia es formar a las fuerzas libias fuera del país.
"Estamos considerando la petición de cómo podemos asistir, de manera que añada valor", ha afirmado Rasmussen, que ha explicado que la OTAN deberá "coordinarse estrechamente" con otros actores presentes en Libia como la ONU y la UE a través de su misión de asistencia fronteriza.
"Tenemos que garantizar que no dupliquemos trabajo ni malgastemos recursos", ha justificado, sin aclarar si todavía esperan una respuesta definitiva de Libia para determinar su posible ayuda o hay problemas de interlocución con las autoridades libias.