ISLAMABAD, 29 Dic. (EP/AP) -
La Comisión Electoral de Pakistán anunció hoy que va a celebrar una reunión de emergencia en los próximos días para evaluar el impacto de la ola de violencia que sacude el país tras el asesinato de la ex primera ministra Benazir Bhutto en las elecciones parlamentarias previstas para el 8 de enero.
Además, en un comunicado, indicó que durante los disturbios se han destruido nueve colegios electorales, incluidos los censos electorales que había en ellos, y que la violencia ha afectado negativamente la impresión de las papeletas, el entrenamiento del personal electoral y la logística previa a la votación.
En la declaración, emitida por el portavoz de la Comisión, Azmatulla Shaij, éste no indica si el organismo considerará una eventual recomendación de aplazamiento en la reunión, prevista para el lunes.
Ayer, el primer ministro interino, Mohammedmian Soomro, había indicado que el Gobierno provisional no tiene planes inmediatos para aplazar las próximas elecciones generales. "Ahora mismo, las elecciones permanecen tal como está", declaró en una conferencia de prensa. "Consultaremos a todos los partidos políticos para tomar cualquier decisión al respecto. Estoy dispuesto a reunirme con ellos ahora mismo", añadió.
La prensa paquistaní da hoy prácticamente por hecho que las elecciones no se celebrarán en la fecha prevista. El diario 'Dawn' recuerda que el principal líder opositor en la actualidad, el ex primer ministro Nawaz Sharif ya anunciado que su partido, la Liga Musulmana de Pakistán-N, boicoteará las elecciones.
Asimismo, subraya que para el Partido del Pueblo de Pakistán (PPP) de Bhutto se presentan tiempos difíciles, ya que se ha quedado sin líder y además organizar una campaña electoral sin ella es una tarea complicada, teniendo en cuenta los 40 días de luto que ha declarado, por lo que se prevé que se pronuncie en los próximos días y no se descarta que tampoco participe.
Además, subraya el diario, si los dos partidos a los que Sharif ha llamado a unirse al boicot deciden seguirle, el Jamiat Ulema-i-Islam de Maulana Fazlur Rehman y el Partido Nacional Awami de la Provincia de la Frontera Noroeste, supondría un boicot completo de la oposición. Tampoco el partido gobernante, Liga Musulmana de Pakistán-Q se ha pronunciado sobre las elecciones tras la muerte de Bhutto.
