ISLAMABAD, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Pakistán, Syed Yousuf Raza Gilani, anunció hoy ante la Asamblea Nacional que compensará económicamente a los familiares de todas las víctimas de los atentados suicidas perpetrados esta semana en Wah Cantt y Dera Ismail Khan, en el noroeste del país, y cifró en 101 los muertos por ambos ataques.
Las familias de las víctimas de ambos atentados recibirán cerca de 2.700 euros, mientras que los heridos recibirán alrededor de 900 euros, según anunció el primer ministro en una intervención pública recogida por la agencia de noticias paquistaní APP. Además, el ministro dijo que el Gobierno estudiaba dar trabajo a los afectados.
En el atentado perpetrado ayer por dos terroristas suicidas frente a la principal fábrica de armas del país en Wah Cantt, localidad situada a 30 kilómetros de Islamabad, el balance oficial de víctimas es de 67 muertos y 66 heridos.
Los dos terroristas talibán hicieron estallar, con un intervalo de un minuto y mientras los empleados realizaban un cambio de turno, la carga explosiva que llevaban instalada en sus cuerpos frente a la entrada principal y la entrada de mercancías del complejo, en el que entre 30.000 y 40.000 personas fabrican artillería, tanques y munición antiaérea para las fuerzas armadas paquistaníes.
En cuanto al atentado suicida del pasado martes frente al hospital de la ciudad paquistaní de Dera Ismail Khan, en el noroeste del país, Gilani informó de que un total de 34 personas fallecieron. Un grupo de chiíes protestaba por la muerte de uno de sus líderes frente al principal hospital de Tank, región situada a unos 280 kilómetros al suroeste de Islamabad, cuando un supuesto suicida hizo estallar la carga explosiva. Este hospital había recibido a primera hora el cadáver del líder chií, quien fue asesinado por un grupo de hombres armados.
Gilani, además, expresó su dolor y pesar por los atentados y propuso a la Asamblea la formación de un comité para estudiar las causas, así como el número de víctimas y de desplazados en la operación militar que el Ejército mantiene contra los talibán en Bajaur, provincia conocida como santuario y refugio de los talibán paquistaníes en el noroeste del país, cerca de la frontera con Afganistán.
A principios de este mes, un grupo armado de milicianos atacó con artillería y armas automáticas un puesto de control policial, hiriendo a cinco policías. En respuesta, las fuerzas de seguridad paquistaníes dieron inicio a una operación contra diversos refugios talibán en Bajaur.
Los talibán se atribuyeron ayer la autoría de los dos atentados perpetrados esta semana en respuesta a la campaña militar en Bajaur y aseguraron que si el Gobierno no detiene el operativo continuarán cometiendo atentados en todo el país.
Las operaciones de las fuerzas de seguridad en Bajaur desde principios de este mes se han cobrado la vida de más de 170 personas y han obligado a cerca de 150.000 personas a abandonar sus casas, según cifras gubernamentales.
