ISLAMABAD 10 Dic. (EP/AP) -
El ex primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, líder de la Liga Musulmana de Pakistán-N (LMP-N), comenzó hoy la campaña electoral en favor de su partido a pesar de que las autoridades electorales han rechazado la candidatura del propio Sharif. Mientras, los abogados, símbolo de las manifestaciones contra el presidente Pervez Musharraf, muestran su decepción por la actitud de Sharif.
La gira de Sharif comienza hoy con un acto político en la ciudad de Faisalabad e incluirá cinco ciudades más, según informaron fuentes de la LMP-N. El partido anunció ayer que concurriría finalmente a las elecciones a pesar de que muchos de los 33 partidos que componen el Movimiento de Todos los Partidos, del que también forma parte la LMP-N, abogan por boicotear las elecciones para no legitimar el régimen de Musharraf.
"Barreremos en las elecciones si las reglas del juego son justas", afirmó uno de los máximos dirigentes de la LMP-N, Sadiq ul Farooq.
Los abogados, uno de los colectivos más beligerantes contra el régimen de Musharraf, ya han mostrado su decepción por la decisión del partido de Sharif de presentarse a las elecciones. "La nación ha sido abandonada por la clase política", afirmó un antiguo juez del Tribunal Supremo, Wajihuddin Ahmed, rival de Musharraf en la votación para la elección presidencial celebrada en octubre en el Parlamento.
"Hoy no hay Constitución ni comisión electoral independiente y, sobre todo, no hay una poder judicial independiente", añadió Ahmed, quien aseguró que los abogados seguirán con la lucha "a vida o muerte".
La postura que aboga por el boicot electoral ya se vio debilitada por el anuncio del Partido Popular de Pakistán, de la ex primera ministra Benazir Bhutto, que anunció que concurriría a las elecciones y que se perfila como favorito junto con la Liga Musulmana de Pakistán-Q, el partido de Musharraf.
El entorno de Musharraf ya ha mostrado su satisfacción por los últimos acontecimientos políticos. "Cuantos más participen en las elecciones, mejor será para el futuro de Pakistán", declaró un portavoz de la Presidencia, Rashid Qureshi.