PARIS, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
La nueva primera secretaria de los socialistas franceses, Martine Aubry, anunció hoy durante la felicitación a la prensa del Año Nuevo que su partido presentará a finales de esta misma semana una moción de censura contra el Gobierno con la intención de que sea debatida en el Parlamento la próxima semana. Además, prometió ejercer una oposición que "denuncia, propone y reacciona".
Se trata de la segunda moción del Partido Socialista contra el Ejecutivo encabezado por François Fillon tras la presentada para protestar por el refuerzo de las tropas francesas en Afganistán, una iniciativa que fue rechazada sin dificultad el pasado mes de abril por los diputados de la UMP y los de Nuevo Centro.
En esta ocasión, el motivo de la propuesta socialista es la crisis económica y la amenaza que, según el PS, representa el presidente Nicolas Sarkozy para las libertades públicas. En este terreno, Aubry prometió un PS "extremadamente combativo" en el capítulo de las libertades, objetivo prioritario del principal partido de la oposición contra el jefe del Estado desde que comenzó el año.
Esta denuncia sobre la actitud de Sarkozy en materia de libertades se ha materializado en los debates sobre el proyecto de reforma de la ley audiovisual. A ello se añade el anuncio de supresión de la figura del juez de instrucción y la reforma del reglamento parlamentario que el PS critica al entender que lamina los derechos de la oposición.
"Todos los que no están de acuerdo con Sarkozy se convierten en delincuentes: magistrados, periodistas, oposición, sindicalistas", se quejó Aubry. "Tendrá que darse cuenta de que Francia también puede expresarse y yo prefiero que lo haga en el Parlamento y no en la calle", prosiguió.
Por otro lado, la líder socialista dedicó buena parte de su discurso a las elecciones europeas del próximo junio, anunció el lanzamiento de una campaña de adhesión al Manifiesto de los Socialistas Europeos y adelantó que no será candidata pero que se implicará "plenamente" en la campaña.
"Hoy los socialistas piensan primero en los franceses. Las cosas avanzan", agregó queriendo dejar así atrás su rocambolesca elección al frente de la primera secretaría del partido, que puso en evidencia las profundas divergencias internas en el seno del socialismo francés.
