JERUSALÉN, 3 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente de Israel, Simon Peres, ha concedido catorce días más de plazo al primer ministro electo, Benjamin Netanyahu, para formar un gobierno después de que fracasaran las negociaciones mantenidas con la tercera fuerza más votada, El Movimiento, durante el mes de febrero.
En un comunicado, Netanyahu aduce que algunos partidos "ultrortodoxos" han boicoteado los acuerdos para formar "el gobierno más amplio posible".
"No he conseguido completar mi tarea porque, a día de hoy", ha añadido, "hay un boicot por parte de un determinado sector". Netanyahu pidió el viernes a Peres que le diera más tiempo.
En caso de que, de aquí al 16 de marzo, el primer ministro no consiga la mayoría absoluta parlamentaria, Peres podría encargar la tarea de formar Gobierno al líder de un partido rival y, si no se consigue, los israelíes tendrían que volver a las urnas.
ESCENARIO POLÍTICO
La alianza Likud-Israel Beitenu --formada por la derecha israelí y el partido ultraderechista del exministro de Exteriores Avigdor Lieberman-- encabezada por Netanyahu obtuvo el 23,2 por ciento (31 escaños de los 120 del Knesset, el Parlamento israelí) el pasado enero.
Netanyahu se ha negado a formar Gobierno con los partidos políticos que lograron el segundo y tercer lugar respectivamente, el Yesh Atid (Hay Futuro) y Bayit Yehudi,(Hogar Judío), porque exigen que Israel mantenga la exención del servicio militar y las subvenciones a favor de los judíos ultraortodoxos.
El negociador de Likud-Beitenu, David Shimron, desestimó el viernes un acuerdo con el partido Bayit Yehudi que la formación Yesh Atid se "niega" a formar Gobierno con los ultraortodoxos
La coalición saliente de Netanyahu incluye dos partidos ultraortodoxos, que lo han respaldado en su política vinculada con los territorios ocupados de Cisjordania, desafiando a las potencias mundiales.
Bayit Yehudi es mucho menos complaciente respecto a los temas que conciernen al pueblo palestino, después de que Netanyahu haya indicado que quiere reiniciar las conversaciones de paz. por el contrario, Yesh Atid ha afirmado que la diplomacia israelí es demasiado apática.
