GINEBRA (SUIZA), 30 (Reuters/EP)
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, ha transmitido por escrito al presidente egipcio, Mohamed Mursi, su disconformidad por el reciente decreto por el que expande sus poderes "por encima del escrutinio judicial", y le pide que reconsidere su decisión.
"Desde mi punto de vista, esta provisión contraviene la noción fundamental del Estado de derecho al poner los actos del presidente por encuma del escrutinio juidicial y al impedir cualquier tipo de respuesta legal, independientemente de su naturaleza", escribió Pillay en su misiva, enviada el pasado martes.
En el texto, Pillay le pide que reconsidere el decreto y considera que la ratificación de la nueva Constitución, que tendrá lugar mañana en el Parlamento egipcio, podría tener graves consecuencias "en estas circunstancias". "Se corre el riesgo de dividir profundamente al país", consideró Pillay.
Además, Pillay advierte de que el país necesita mas garantías para salvaguardar los principios fundamentales del tratado a favor de los derechos civiles y políticos que El Cairo ratificó hace 30 años. Para ello, Mursi debería ordenar el inicio de investigaciones imparciales, así como de un proceso de reconciliación nacional para sacar a la luz los abusos cometidos durante el régimen de su predecesor, Hosni Mubarak.
En su lugar, el decreto de Mursi, que contempla la posibilidad de volver a juzgar a cualquier persona "que haya ostentado un cargo político durante el régimen anterior", rompe la normativa legal por la que se prohíbe repetir el enjuiciamiento de personas legalmente condenadas o absueltas por el mismo delito.
Según el portavoz de Pillay, Rupert Colville, el Gobierno egipcio todavía no ha respondido a la carta, pero sí que se han mantenido desde entonces varias discusiones entre su oficina y la Embajada de Egipto en Suiza.