NUEVA YORK, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Policía egipcia no ha impedido los ataques efectuados entre este domingo y este lunes contra las sedes de los Hermanos Musulmanes y algunos agentes incluso se han unido a las protestas de la plaza Tahrir de El Cairo para reclamar la dimisión del presidente Mohamed Mursi y la intervención del Ejército, según ha informado el 'The New Tork Times'.
Según el corresponsal en El Cairo del rotativo norteamericano, David Kirkpatrick, el Ministerio del Interior ya había advertido antes de las manifestaciones de ayer domingo de que la Policía no protegería las sedes de los Hermanos Musulmanes --el movimiento al que está vinculado Mursi--, y "en el momento de comenzar las protestas, apenas se apreciaba la presencia de agentes".
El corresponsal ha asegurado también en Twitter --y ha enviado una fotografía para ilustrarlo-- que varios agentes vestidos de uniforme se han unido a las protestas en la plaza Tahrir para reclamar la dimisión de Mursi y la intervención del Ejército.
Dos agentes han sido vistos incluso en las cercanías de la sede de los Hermanos Musulmanes con equipos de radios portátiles y sin intervenir para impedir el asalto, ha asegurado el corresponsal.
Según el Ministerio de Sanidad egipcio, ciitado por el diario 'Egypt Independent', al menos 16 personas han muerto y otras 781 han resultado heridas en los enfrentamientos que se produjeron ayer domingo en todo el país durante las protestas contra Mursi.
Entre estas víctimas mortales figurarían las siete personas fallecidas en el asalto de las últimas horas contra la sede de los Hermanos Musulmanes en el este de El Cairo, según ha informado la agencia estatal MENA, que apunta a que el balance podría ser incluso de ocho.
Decenas de manifestantes irrumpieron esta mañana en la sede de los Hermanos Musulmanes en Moqattam y procedieron a saquear el edificio tras una noche de enfrentamientos, según la agencia estatal.
Los manifestantes, según MENA, entraron en el edificio después de que los miembros de la organización que trataban de defenderlo desde ayer por la tarde huyeran en un coche, abriendo fuego contra las personas congregadas. Según la agencia de noticias estatal, hay siete muertos y 45 heridos, pero una fuente de seguridad ha apuntado que los muertos son ya ocho.
Este domingo, los manifestantes contrarios a Mursi lanzaron piedras y cócteles molotov contra las dependencias de los Hermanos Musulmanes, mientras miembros de la organización trataban de repeler el ataque realizando disparos.
