La Policía sospecha que uno de los pirómanos es un joven con un amplio historial delictivo

Actualizado: miércoles, 11 febrero 2009 23:58


CANBERRA, 11 Feb. (OTR/PRESS) -

La Policía australiana cree que uno de los pirómanos responsables de los incendios que están devastando el sureste del país, y que ya han causado cerca de 200 muertos, sería un hombre joven que pudo actuar para crear confusión o buscar notoriedad y podría tener un historial de violencia, según los expertos. Por otro lado, los bomberos se han hecho con el control de muchos de los incendios, mientras las autoridades mantienen que eran imprevisibles.

En opinión de estos analistas, el responsable respondería al perfil de un hombre solitario y procedente de un entorno pobre. Las estadísticas muestran que este tipo de delincuentes son difíciles de atrapar. "Encender un fuego supone una necesidad psicológica para ellos", explicó el analista Damon Muller, del Instituto de Criminología de Australia. "Algunos (pirómanos) sufren una sensación de impotencia y encienden fuegos para creer que tienen el control", señaló por su parte el psicólogo Robert Heath, de la Universidad de Australia del Sur.

Hay otro grupo distinto de pirómanos que se caracteriza por sentir una atracción psicológica hacia el fuego y ver cómo se queman las cosas. El tercer grupo, por otro lado, tiene la necesidad de ser visto como un héroe, por lo que enciende un fuego para poder realizar algún acto heroico. La mayoría de los pirómanos son hombres, pero también hay muchas mujeres que suelen ser, de media, entre tres y cuatro años mayores que los pirómanos masculinos, según indican las estadísticas.

En Australia, provocar un fuego de manera deliberada con resultado de muerte conlleva una sentencia de hasta 25 años de prisión, mientras que iniciar un incendio forestal intencionadamente o de manera imprudente acarrea una pena de un máximo de 15 años. Además, el fiscal general de Australia, Robert McClelland, aseguró que los responsables podrían ser acusados de asesinato. Pero atrapar a los responsables de los grandes incendios que han quemado ya más de 350.000 hectáreas y destruido más de 10.000 hogares es verdaderamente difícil a menos que haya testigos, y es aquí donde se están centrando las investigaciones.

ALGUNOS YA ESTÁN CONTROLADOS

Los bomberos han conseguido controlar muchos de los incendios que han devastado el sureste de Australia y que han causado la muerte de al menos 181 personas y han dejado sin hogar a varios millares. Las autoridades estatales aseguraron que los incendios que comenzaron el pasado fin de semana no se podrían haber previsto mediante un sistema de alerta temprana.

La Autoridad de Incendios del País (CFA, por sus siglas en inglés) afirmó que la situación en el estado de Victoria está ahora más controlada, según informó la cadena australiana ABC. El director de operaciones de la CFA, Mark Glover, dijo que todos los mensajes de amenaza urgente que se habían emitido se redujeron durante la noche al nivel de alertas. La gente "aún tiene que ser consciente de que la actividad del fuego podría afectarle, pero la probabilidad de que eso ocurra es mucho, mucho menor", explicó. Durante los próximos días, los bomberos se dedicarán a reforzar las líneas de control, antes de que vuelvan los vientos la próxima semana.

En algunas zonas del estado de Victoria ha llovido, lo cual ha ayudado a los bomberos, que llevan trabajando sin pausa desde el sábado. Glover dijo previamente que la mejor noticia era que no se preveía un aumento en el número de localidades directamente afectadas por el fuego. "Supongo que siempre existe una amenaza, pero todas nuestras alertas se han bajado de categoría, así que ahora sólo son mensajes de alerta", dijo, y agregó que se está haciendo lo posible para evitar que el incendio de Bunyip se una a otros cercanos y pongan en peligro el sistema de suministro de agua de Melbourne.

IMPREVISIBLE

Por su parte, el ministro principal de Victoria, John Brumby, aseguró que ningún sistema de alerta temprana podría haber evitado los devastadores incendios. Además, indicó que en las dos últimas reuniones del Consejo de Gobiernos Australianos se examinó un sistema de información de este tipo, si bien aún no está disponible la tecnología necesaria para su aplicación.

Brumby dijo que la red de telecomunicaciones se habría visto desbordada el sábado pasado y que, aunque hubiese podido funcionar, la velocidad a la que se extendió el fuego a causa del viento habría provocado la muerte de muchas personas de igual manera. Sin embargo, adelantó que seguramente en el futuro se opte por enviar mensajes de texto para avisar a la población sin saturar el sistema. Entretanto, la Policía de Victoria, que está investigando las causas de los incendios, ha vuelto a pedir información a los ciudadanos. Un total de 150 agentes integrados en la Fuerza Operante Phoenix están trabajando en seis áreas.

Las autoridades afirman que cuatro de los seis incendios que se han producido no fueron provocados, mientras que aún se está intentando esclarecer el origen del fuego que quemó la localidad de Marysville, al noreste de Melbourne, en donde han muerto quince personas, aunque Brumby señaló que finalmente podrían ser hasta 100. Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, lamentó profundamente las muertes causadas por los incendios y envió en un comunicado sus condolencias a las familias de las víctimas.