La Presidencia alemana propone que la UE reanude el diálogo con Cuba en todos los ámbitos de interés común

Actualizado: viernes, 30 marzo 2007 17:45


BRUSELAS, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Presidencia de la UE, que recae este semestre en Alemania, ha sometido a la consideración de los Estados miembros un documento para perfilar la estrategia comunitaria hacia Cuba que, entre otros aspectos, afirma que "la UE celebraría la vuelta a un diálogo global y abierto con las autoridades cubanas en todos los temas de interés mutuo para mejorar las relaciones entre la UE y Cuba". Apuesta también por la "cooperación" en los órdenes de la "economía, ciencia, cultura y Derechos Humanos" y también en "turismo", que podrá ejercitarse a "alto nivel" político.

Éste es uno de los 11 puntos de los que se compone el documento que presentó la Presidencia a los países de la UE el pasado mes de febrero, en cumplimiento del mandato que le dieron los Estados miembros en junio de 2006, cuando revisaron por última vez la posición común de la UE hacia Cuba. Entonces, los Gobiernos europeos pidieron a la Presidencia semestral que elaborara un texto de orientación sobre la estrategia a medio y largo plazo que debería seguirse hacia la isla.

La última discusión sobre el documento, al que tuvo acceso Europa Press, se produjo ayer mismo, cuando los Estados miembros volvieron a constatar el desacuerdo que existe entre ellos. Fuentes comunitarias explicaron que las diferencias se deben más bien sobre si es oportuno o no hacer un nuevo posicionamiento sobre Cuba que sobre el fondo de un texto que Berlín ha redactado "en consulta" con los Estados miembros para no provocar "las reticencias" de ninguno.

El documento alterna las manifestaciones a favor de mejorar el diálogo con las autoridades de la isla con menciones a la necesidad de que sean respetados los principios de democracia, Derechos Humanos y Estado de Derecho. En uno de los puntos, el texto alude al "punto de vista" de la UE "sobre la democracia, los Derechos Humanos y las libertades fundamentales" y en otro "urge a la liberación de los presos políticos".

Empieza negando cualquier intención de la UE de "interferir en los asuntos internos de Cuba" y "subraya el respeto hacia el Gobierno y el pueblo de Cuba". La UE, no obstante, dice estar "dispuesta tomar todas las medidas de apoyo para un desarrollo positivo en Cuba", reza el texto. Afirma, asimismo, que "el periodo de transición por la precipitada enfermedad de Fidel Castro no ha dado lugar a inestabilidad política".

El texto atribuye "al pueblo cubano" la responsabilidad de "determinar su propio futuro de acuerdo con el principio de autodeterminación" y asegura que "no es el objetivo de la UE provocar un cambio de régimen en Cuba", a pesar de que "cree que debe lograrse por la democracia, el Estado de derecho y los derechos humanos".

Entre los distintos ámbitos en los que la UE se muestra dispuesta a colaborar con La Habana, ofrece su "experiencia" para "adaptar su economía para afrontar los retos de la globalización", un aspecto en el que menciona específicamente al turismo. Así, "hace un llamamiento al Gobierno cubano para que evite las medidas que, por desarrollos políticos no pacíficos, puedan poner en peligro la seguridad de los cientos de miles de turistas europeos".

El documento asegura que la UE "seguirá insistiendo en la abolición de la Ley Helms-Burton" en virtud de la cual Estados Unidos sanciona a empresas nacionales y extranjeras que tengan actividades en Cuba, "especialmente por lo que respeta al derecho a viajar libremente en ambos sentidos, a visitar a las familias y a enviar remesas".

En este sentido, constata que "es necesario" un mayor diálogo sobre Cuba "en las relaciones trasatlánticas y con otros países de América Latina".

SIN ACUERDO EN LA UE

Las fuentes explicaron que en el debate que celebraron ayer los Estados miembros se percibió la existencia de dos "corrientes de opinión", no de bloques cerrados porque hay también distintos "matices" entre lo que opinan unos y otros. En este escenario, la Presidencia decidió retomar la discusión posteriormente en el seno de una reunión del Comité para América Latina (COLAT), sin una fecha determinada de momento.

Según indicaron, España se sitúa dentro de un "pequeño grupo de países" que, sin entrar en el fondo del documento, consideran que una declaración de la UE sobre Cuba en estos momentos sería "contraproducente" y que "la situación sobre el terreno no la justifica". Añadieron que la delegación española estimó que la posición común de la UE, que como cada año desde su implantación en 1996 volverá a revisarse en junio, es "suficiente".

Por el contrario, hay un grupo "un poco más numeroso" de Estados miembros que estiman que este documento es una "buena base" y que contemplarían la posibilidad de hacer una declaración con sus "grandes líneas", independientemente de que se siga trabajando en los "detalles". Éstos creen que "sí debería haber una declaración ahora", que mostrase "un compromiso fuerte de los derechos humanos" y que "recordara los principios" de la UE a este respecto.