RDCongo.- Un tribunal de Ituri condena a cadena perpetua a once militares por el asesinato de 30 personas en un aldea

Actualizado: miércoles, 21 febrero 2007 11:34

KINSHASA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un tribunal militar del distrito de Ituri, en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), ha condenado a cadena perpetua a un capitán y a diez soldados del Ejército por el asesinato de 30 personas en la aldea de Bavi, a 32 kilómetros al sur de Bunia, y a cinco antiguos milicianos rebeldes por el asesinato de dos observadores militares de Naciones Unidas en 2003, según informó la agencia de prensa de la ONU, IRIN.

El tribunal condenó al capitán François Molessa, alias 'Bozize', y a otros diez soldados a cadena perpetua por el asesinato de 30 personas en la aldea de Bavi, a 32 kilómetros al sur de Bunia, capital de Ituri, entre agosto y septiembre de 2006. También han sido expulsados del Ejército.

El 22 de noviembre de 2006, los investigadores militares del tribunal y la División de la ONU para los Derechos Humanos en la RDC descubrieron tres fosas comunes con los restos de mujeres y hombres que habían sido ejecutados de forma sumaria. "Las víctimas fueron seleccionadas como enemigos", declaró el juez del tribunal, el comandante Innocent Mayembe. "Los hombres fueron golpeados con barras de hierro hasta la muerte", añadió.

El tribunal ha ordenado también a los condenados el pago de entre 3.800 y 15.000 euros como compensación a las familias de las víctimas, dependiendo del grado de implicación de cada soldado.

Un abogado de las víctimas, Christian Lukusha, celebró que el tribunal haya reconocido el derecho de sus representados, pero precisó que las compensaciones suponen "una cantidad demasiado pequeña". "Hemos pedido al tribunal que aumente la compensación hasta 38.000 euros", declaró.

ASESINATO DE OBSERVADORES DE LA ONU

Por otra parte, el mismo tribunal condenó a cadena perpetua a Uzele Ubemu, Jules Acida, Ufoyuru Agenong'a, Eric Ndjango y Aingani Aikoe, miembros del Frente de los Nacionalistas Integracionistas (FNI), un grupo armado activo en Ituri, por el asesinato del comandante jordano Saswat Oran y del capitán David Banda, de Malawi, el 13 de mayo de 2003 en Mongbwalu, una localidad minera situada a 80 kilómetros al norte de Bunia.

"Esta sentencia envía un mensaje muy enérgico: el reinado de la impunidad ha llegado a su final", declaró ayer desde Kinshasa un portavoz de la Misión de la ONU en la RDC (MONUC), Kemal Saiki.

Los cinco han sido condenados por crímenes de guerra, asesinato y destrucción de equipos de la ONU. Aparte, cada uno de ellos deberá pagar una multa de 53.000 francos congoleños (cerca de 76 euros).

"Uzele Ubemu disparó en un primer momento al capitán David Banda cuando se dirigía a un helicóptero, impidiéndole así hacer una llamada por radio", declaró el juez Mayembe.

La sala condenó también a Kashala Kabongo, quien fue juzgado junto a los otros cinco, a 20 años de trabajos forzados en la cárcel. Un séptimo acusado, Bakovi Aingui, fue absuelto.