ROMA 13 Sep. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -
La Iglesia católica de Rumanía ha acogido "con gran alegría" la reciente elección del obispo metropolitano Daniel como nuevo Patriarca de la Iglesia Ortodoxa rumana y sucesor del Patriarca Teoctisto, que falleció el pasado mes de julio, según declaró el arzobispo metropolita de Bucarest, Ioan Robu, a Radio Vaticana.
Robu, que también es presidente de la Conferencia Episcopal de Rumanía, consideró muy positivas las primeras declaraciones que hizo el Patriaraca Daniel tras su elección y en las que aseguró que continuará la actividad desarrollada por su predecesor, y por lo tanto que "proseguirá un camino de buen entendimiento y amistad" con las comunidades católicas.
El Patriarca Daniel, de 56 años edad y conocido por su posición ecuménica y deseo de modernizar la institución, era considerado el favorito para suceder al Patriarca Teoctisto, que murió este verano a los 92 años de edad y después de permanecer durante 20 años como jefe de la Iglesia rumana.
Tras su toma de posesión, el Patriarca Daniel aseguró tener "el deseo de servir a la iglesia como lo hizo Teoctisto, quien nos dejó una rica y luminosa herencia que debemos conservar, alimentar y cultivar". Además, llamó a los rumanos a "amar a la Iglesia y al país para ayudarnos", ya que "necesitamos vuestra cooperación", subrayó.
Daniel fue uno de los miembros fundadores de un grupo que abogaba por la renovación de la Iglesia Ortodoxa, aunque este movimiento fue disuelto después de su elección como obispo metropolitano de Iasi. El Patriarca Teoctisto también destacó por su interés en el diálogo ecuménico y que, en el año 1999, le llevó a recibir al Papa Juan Pablo II durante la visita que el Pontífice realizó a Rumanía, la primera que hacía a un país de religión ortodoxa.