LONDRES 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) ha reclamado que se abra una investigación "completa, imparcial y de alcance" sobre la implicación de las autoridades británicas en las violaciones de Derechos Humanos cometidas desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, en particular en las detenciones y entregas ilegales de prisioneros y en las torturas perpetradas en terceros países.
"Hay pruebas convincentes de que Reino Unido estuvo implicado en esas violaciones de Derechos Humanos", declaró el director de Política y Asuntos Gubernamentales de la sección británica de AI, Jeremy Croft. "Hasta la fecha, la respuesta del Gobierno ha consistido en negarlo todo y ocultarlo detrás de un muro secreto", lamentó.
Esta actitud revela que "no existe un compromiso real con los principios de transparencia y responsabilidad", añadió Croft, quien reclamó una "investigación completa, independiente y de alcance sobre la implicación de Reino Unido en abusos tales como las entregas, las detenciones ilegales y las torturas cometidas en el exterior después del 11 de septiembre de 2001".
"El Gobierno británico tiene, en virtud de las leyes nacionales y de las normas internacionales de Derechos Humanos, la obligación de investigar", advirtió. Aparte, "la sociedad necesita garantías de que las autoridades británicas actúan de acuerdo con la ley y dentro del respeto a los Derechos Humanos básicos", agregó.