R.Unido.- La mayoría de los escoceses quieren un referéndum sobre la independencia en 2010, según un sondeo

Actualizado: martes, 30 junio 2009 15:43

El Gobierno aspira a convocarlo aunque no tiene la mayoría necesaria y la sociedad se decanta por continuar en Reino Unido

LONDRES, 30 Jun. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Eva Martínez Millán) -

La mayoría de los escoceses están de acuerdo con la convocatoria de un referéndum sobre la independencia el próximo año, como había prometido el propio ministro principal, Alex Salmond, en la campaña electoral de 2007 que por primera vez aupó al poder al Partido Nacionalista Escocés (SNP, en sus siglas en inglés).

Según un sondeo de la BBC, el 58 por ciento de los ciudadanos quieren la celebración de una consulta para elegir entre la independencia respecto a Reino Unido o la devolución con incremento de poderes, opción que defienden las formaciones unionistas y que, en cualquier caso, aparece como la opción mayoritaria en la encuesta.

Sin embargo, el porcentaje de aquellos que apoyan la separación varía significativamente en función de cómo se formula la pregunta en un estudio demoscópico realiazado entre 1.010 personas. Así, a la cuestión '¿Cómo votaría en un referéndum sobre la independencia de Escocia?', el 54 por ciento dice que no cree que el territorio debiera independizarse, por el 38 por ciento que apuesta por la opción contraria.

No obstante, en respuesta a si se está de acuerdo con que 'El Gobierno escocés debería negociar un acuerdo con el de Reino Unido para que Escocia se convierta en un Estado independiente', formulación por la que se decantaría el Ejecutivo de Alex Salmond en un plebiscito, el 42 por ciento se muestra favorable por cinco de cada diez que lo rechazan.

ESCENARIOS

El sondeo también interpela acerca de los escenarios preferidos por los ciudadanos para la gobernación de Escocia y sólo el 28 por ciento apoya la independencia, por el 47 por ciento que prefiere continuar como miembro de Reino Unido, aunque el Parlamento regional tenga capacidad de decidir sobre cuestiones como la política fiscal o el gasto. El 22 por ciento restante quiere no sólo seguir como miembro de la Union Jack, sino que las capacidades anteriores competan al Gobierno británico.

Por lo que respecta a las posibilidades de que Escocia sea completamente indendiente en 20 años, uno de cada diez lo consideró muy probable; por el 28 por ciento que lo ve bastante probable; el 34 que cree que es bastante improbable y el 24 por ciento que lo ve muy improbable.

POSICIONES

En este contexto, el Gobierno de Alex Salmond mantiene su intención de convocar un plebiscito el próximo año, pese a la oposición de los unionistas y del propio Ejecutivo de Gordon Brown, quien se ha comprometido a "lo que sea necesario" para preservar la unidad de Reino Unido. Además, Salmond carece de la mayoría parlamentaria necesaria para garantizar el referéndum.

Sin embargo, el dirigente escocés continúa con las previsiones anunciadas cuando se convirtió en líder del SNP en 2005 e incluidas en la reforma constitucional que planea, en paralelo al desarrollo de la última fase de la "conversación nacional" sobre el futuro de Escocia que su propio gabinete impulsó en un libro blanco en 2007.

Esta apuesta ha granjeado al primer ministro numerosas críticas entre quienes lo acusan de promover una obsesión partidaria, si bien el dirigente escocés ha seguido adelante a través de un proceso con el que ha venido intentando integrar al conjunto de las instituciones de la sociedad, desde consorcios económicos a universidades, para que se sumen al debate.

Por su parte, los partidos unionistas apuestan por impulsar la fórmula de la devolución con incremento de poderes, que no considera la opción de la independencia, y que, según la oposición, traduce la corriente dominante del país.