R.Unido.- Los médicos británicos debatirán si se oponen a que se permita ayudar a morir a los enfermos terminales

Actualizado: jueves, 29 junio 2006 17:25

Líderes religiosos y grupos pro vida manifiestan su descontento ante la iniciativa y anuncian la presentación de firmas al primer ministro

LONDRES, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Médica Británica comenzará hoy a debatir si los doctores muestran su oposición a los cambios en la legislación para que se permita ayudar a morir a los enfermos terminales. El mes pasado, la Cámara de los Lores votó en contra de la ley presentada por el Gobierno para que se permita a los médicos ayudar a morir a pacientes con enfermedades terminales.

La ley, que ahora volverá a la Cámara de los Comunes, se aplicaría si es aprobada a aquellas personas de Inglaterra y Gales que tienen una esperanza de vida de seis meses y que están sufriendo de forma insoportable, aunque todavía mentalmente poseen capacidad para tomar decisiones.

El pasado año, la Conferencia de la Asociación Médica Británica dijo que el suicidio asistido y la eutanasia son asuntos que deben ser debatidos por la sociedad y el Parlamento. "La Asociación Médica Británica no debe oponerse a la legislación que altera la ley criminal pero debe pedir que haya salvaguardas tanto para los pacientes como para los doctores que no quieran verse involucrados en este tipo de actividades", indicó.

No obstante, hubo un amplio grupo que se mostró implacablemente opuesto a cualquier forma de suicidio asistido. Argumentan que las mejoras en la sanidad suponen que incluso en los casos de enfermos en peores condiciones, éstos pueden recibir ayuda efectiva hasta el final de sus días.

Tanto la eutanasia como el suicidio asistido son ahora ilegales en Reino Unido. La ley para la Muerte Asistida para los Enfermos Terminales permitiría a los doctores recetar medicamentos a la persona enferma para que los tome y acabe con su vida. Según la legislación británica la muerte asistida es cuando el médico receta medicación que el paciente puede tomar para acabar con su vida, mientras que la eutanasia voluntaria se produce cuando es el médico quien ayuda al paciente a morir.

Lord Joffe se refirió a este asunto explicando que se debe permitir que los pacientes padezcan un sufrimiento extremo "por el bien de la sociedad en su totalidad". En cambio, Lord Carlile valoró: "Todo el mundo en esta Cámara sabe que la intención de esta ley es clara y es llegar en algún momento a permitir la eutanasia voluntaria. Este ha sido siempre y continúa siendo el objetivo".

GRUPOS PRO VIDA

El grupo provida "Care Not Killing" entregará una petición al 10 de Downing Street en la que se han recogido más de 100.000 firmas para pedir que no se cambien las leyes. Mientras, los líderes religiosos mostraron su descontento con la ley. El arzobispo de Westminster, Cormac Murphy-O'Connor, el rabino en jefe de las congregaciones de la Commonwealth, Sir Jonathan Sacks, publicó una carta pidiendo a los legisladores que rechacen la ley.

"Creemos que toda vida humana es sagrada y Dios la dio con un valor que es inherente, no condicional", señala. "Pedimos a los legisladores que rechacen cualquier apoyo a esta ley para garantizar que la ley británica continúa salvaguardando el principio de la intención de matar o ayudar a matar a un humano inocente es equivocado", reza.