LONDRES, 29 Mar. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -
El Gobierno británico dividirá el Ministerio del Interior en dos distintos departamentos, uno de Justicia y el otro de Seguridad, según anunció hoy el ministro, John Reid, ante la Cámara de los Comunes.
En virtud de estas reformas, el actual Departamento para Asuntos Constitucionales tomará el control de las prisiones y la prevención de delitos y cambiará su nombre por el de Ministerio de Justicia. Las competencias restantes serán controladas por el Ministerio del Interior, que se ocupará de la lucha contra el terrorismo, la seguridad y la inmigración.
El Ministerio de Justicia podría estar formado en los próximos dos meses. En la actualidad se ocupa de estos asuntos Lord Falconer. El Gobierno quiere también formar un nuevo cuerpo de seguridad nacional que una vez al mes se reunirá para que presentar todos los informes sobre el departamento.
Durante la presentación de estos cambios, John Reid declaró que el Ministerio se dividirá para poder responder a las necesidades de los ciudadanos. "No es la primera vez en la historia que reformamos el Ministerio para adaptarse a un mundo cambiante", explicó ante los parlamentarios de la Cámara de los Comunes.
Los conservadores han criticado al Gobierno laborista por su labor en el Ninisterio del Interior y aseguran que este departamento no funciona correctamente y que está fracasando en sus políticas. El pasado año, John Reid reconoció que el Ministerio no funciona de forma correcta.
CLARKE
El pasado mes de febrero, su predecesor, Charles Clarke, indicó que el problema en el Ministerio es "la falta de coordinación entre varios de sus elementos". "Creo que dividir el Ministerio del Interior en dos todavía hará empeorar los problemas", declaró.
Se da la circunstancia de que Charles Clarke fue cesado después del escándalo que estalló cuando se supo que 1.019 extranjeros que habían cumplido condena en el Reino Unido fueron puestos en libertad sin haberse considerado antes su deportación.
El Ministerio del Interior ha centrado la polémica de la vida política británica. A principios del año se conoció que los casos de 27.000 británicos que cometieron crímenes en el extranjero, incluidos casos de violaciones y asesinatos, no fueron registrados en los ordenadores de la Policía y del Gobierno.
Además, Reid ha recibido numerosas críticas después de que pidiera a los jueces que sólo manden a la cárcel a las personas más peligrosas para tratar de evitar la saturación de las prisiones. Un juez explicó que como resultado de la petición no ha enviado a la cárcel a un hombre que descargaba a pornografía infantil en internet. Derek Williams, de 46 años dijo: "Tuve suerte de estar fuera". "No se puede acusar al juez por lo que ha hecho, sólo estaba realizando su trabajo", explicó.
El responsable de Interior del partido conservador, David Davis, declaró hoy que la división del Ministerio va a ser desastrosa. "Es un tema político sobre quién controla qué", dijo. "Se trata de distraer al público porque no quieren que se fije en el desastroso estado en el que han dejado a la nación", denunció.
