MOSCU/LONDRES, 16 Jul. (EP/AP) -
El portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Mijail Kaminin, calificó hoy de "inmoral la postura de Londres" después de que el Gobierno británico decidiera expulsar a cuatro diplomáticos rusos en represalia por la negativa de Moscú a extraditar al ex espía ruso Andrei Lugovoi, principal sospechoso del asesinato del también ex agente Alexander Litvinenko, en Reino Unido. Asimismo, previno de que la decisión tendrá "consecuencias" en las relaciones bilaterales.
Según el portavoz ruso, la medida es "una acción bien orquestada para politizar el caso Litvinenko". "Deberían entender bien en Londres que las acciones provocativas por parte de las autoridades británicas no se quedarán sin respuesta y no podrán dejar de producir las más serias consecuencias para las relaciones ruso-británicas en su conjunto", previno.
Para Kaminin, el Gobierno británico está intentando justificar su propio rechazo a extraditar a dos importantes enemigos del Kremlin que han obtenido asilo en Reino Unido, el magnate Boris Berezovsky y el dirigente separatista checheno Ajmed Zakayev.
"Uno tiene la impresión de que con tales acciones están intentando justificar, a ojos del publico mundial, su rechazo de trabajar con los cuerpos de seguridad rusos sobre la cuestión de la extradición a Rusia de Berezovsky y Zakayev", señaló el portavoz a la prensa.
El nuevo ministro de Exteriores británico, David Miliband, anunció hoy que el Gobierno ha decidido expulsar a cuatro diplomáticos rusos ante la negativa del Kremlin a extraditar a Lugovoi en relación con la "horrible muerte de Litvinenko. Reino Unido no usaba la sanción de expulsión desde 1996.
Miliband subrayó en la Cámara de los Comunes que "el Gobierno ruso no ha sido capaz de darse cuenta lo en serio que nosotros tratamos este caso o la seriedad de las cuestiones que implica, pese a los contactos al más alto nivel y las explicaciones claras de nuestra necesidad de una respuesta satisfactoria".
Los acuerdos internacionales estipulan que Lugovoi podría ser extraditado si viaja fuera de Rusia, indicó Miliband. El Foreign Office declinó especificar el rango o posición de los cuatro diplomáticos que serán expulsados.
"Hemos optado por expulsar a cuatro diplomáticos para enviar una señal clara y proporcionada sobre la seriedad de este caso", explicó Miliband.
Los fiscales británicos citan a Lugovoi como el principal sospechoso en el caso, y las autoridades quieren juzgarle por el asesinato de Litvinenko. El ex espía fallecido el pasado 23 de noviembre en un hospital de Londres tras ingerir Polonio 210, una sustancia radiactiva. En una declaración en su lecho de muerte, ésta acusó al presidente ruso, Vladimir Putin, de estar detrás de su asesinato.
Litvinenko dijo que se había sentido mal por primera vez tras reunirse con Lugovoi y el también empresario Dmitry Kovtun en el hotel Millenium de Londres. Rusia había transmitido la semana pasada su rechazo formal a la extradición a los fiscales británicos, que a su vez desestimaron la oferta de Moscú de juzgar a Lugovoi en Rusia.
"El odioso delito del asesinato requiere justicia", aseveró Miliband, que consideró que "esta respuesta en proporcional y está claro contra quién está dirigida". El Foreign Office no ha querido especificar ni el rango ni el cargo de los cuatro diplomáticos rusos que serán expulsados.
