MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de senadores opositores de Filipinas ha presentado una denuncia ante el Tribunal Supremo para que anule la petición del presidente, Rodrigo Duterte, de sacar al país del Tribunal Penal Internacional (TPI), al considerar que se trata de una iniciativa constitucional por no contar con el visto bueno de la Cámara Alta parlamentaria.
El mandatario solicitó formalmente en marzo la salida de Filipinas del TPI después de que esta corte abriese una investigación preliminar por los supuestos crímenes contra la Humanidad que se habrían cometido en el marco de la guerra contra las drogas lanzada por Duterte.
La ratificación de los tratados internacionales requiere del visto bueno de dos terceras partes del Senado, por lo que los demandantes consideran que Duterte no tiene derecho a sacar a Filipinas del TPI por su cuenta. Así, han alegado que su petición debe ser declarada "inválida" y, en consecuencia, paralizar todo el proceso, según el diario 'Philippine Star'.
Un portavoz de Duterte, sin embargo, cree que "no hay base legal" para que prospere el recurso de los senadores. "El presidente sigue siendo el principal arquitecto de la política exterior", ha argumentado el portavoz presidencial, Harry Roque.
Los expertos juristas, en cualquier caso, han advertido a Duterte de que la salida del TPI no protegerá a las autoridades filipinas frente a posibles imputaciones, en la medida en que la corte tiene jurisdicción para analizar y juzgar los delitos cometidos hasta la fecha en que un país rompe definitivamente con el Estatuto de Roma.
