JERUSALÉN 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El líder del Frente Democrático para la Liberación de Palestina, Nayef Hawatmeh, ha resultado herido leve a causa del atentado de este jueves en Damasco, que ha dañado además la Embajada palestina y la sede de la formación, según han informado fuentes del partido.
Hawatmeh, de 74 años de edad, ha sufrido heridas de poca consideración y no ha necesitado ser trasladado al hospital, tal y como ha dicho Jalid Atta, miembro del comité central del DFLP, a la agencia palestina de noticias Maan.
Por su parte, el embajador palestino en Siria, Mahmud al Jadi, ha indicado que Palestina no se verá arrastrado al conflicto en Siria, al tiempo que ha subrayado que se están haciendo esfuerzos para expulsar a los insurgentes armados de los campamentos de refugiados palestinos.
El atentado, que ha sido ejecutado cerca de un puesto de control militar situado en una autopista muy transitada en los alrededores de la sede del partido gubernamental Baaz y de la Embajada de Rusia, ha dejado al menos 64 muertos y 200 heridos.
La explosión del coche bomba en Damasco se ha producido junto a la sede del Baaz y a unos 200 metros de la Embajada de Rusia en el entorno de la calle Al Thawra, en el distrito de Al Mazraa. Al menos quince de los 56 fallecidos son miembros de las fuerzas de seguridad, según el Observatorio, por lo que el resto serían civiles.
Fuentes diplomáticas rusas han informado a la agencia de noticias Itar-Tass de que la explosión ha destrozado varias ventanas, pero ningún empleado de la legación ha resultado herido. "El edificio ha resultado realmente dañado", ha precisado. En declaraciones a Reuters, el gobernador de Damasco, Bishr Sabban, ha explicado que el automóvil transportaba entre una tonelada y una tonelada y media de explosivos.
La agencia estatal de noticias SANA ha informado de la muerte de 53 civiles y de 235 heridos, "en su mayoría viandantes, escolares de un colegio cercano y personas que se trasladaban en sus automóviles", tras un atentado "terrorista" en una zona residencial "densamente poblada" de la calle Al Thawra. La Media Luna Roja y los hospitales de la capital han recibido "los cuerpos de decenas de mártires", ha añadido.
Además, otras ocho personas --tres civiles y cinco miembros de las fuerzas de seguridad-- han muerto en otro atentado con coche bomba en el barrio damasceno de Barza. En este mismo barrio, se ha producido otra explosión, aunque no se ha podido precisar el número de fallecidos.
Asimismo, SANA ha informado de que las autoridades han detectado otro automóvil cargado de explosivos en la misma calle Al Thawra y que "el terrorista suicida que conducía el coche ha sido detenido". Según la televisión estatal, el automóvil transportaba cinco bombas, uno de los cuales con 300 kilogramos de explosivos.
El centro de Damasco se ha librado en buena parte de los efectos del conflicto armado que sufre Siria desde hace dos años, que ha causado alrededor de 70.000 muertos, pero los suburbios de la capital sí han resultado especialmente afectados por la violencia.
Los rebeldes que controlan los distritos del sur y este han atacado las bases del poder del presidente Bashar al Assad a lo largo de los últimos meses y han cometido varios atentados devastadores con bomba este último año. El grupo islamista Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda, ha reivindicado varias de estas acciones y se ha atribuido 17 ataques en la zona de Damasco en la primera mitad de febrero, entre ellos siete atentados con bomba.
GRUPOS VINCULADOS A AL QAEDA
El Ministerio de Exteriores sirio ha remitido sendas cartas al Consejo de Seguridad de la ONU y al secretario general de esta organización para denunciar los atentados de este jueves y culpar de ellos a "grupos terroristas armados vinculados a Al Qaeda".
Estos grupos, de los que no ha dado más detalles, habrían recibido "ayuda material, logística, mediática y cobertura política" de varios países, según la nota recogida por la agencia oficial SANA. Estos países, según Damasco, han violado las "obligaciones" internacionales relativas a la lucha contra el terrorismo.
El Frente al Nusra, una milicia siria que mantiene vínculos con la organización terrorista Al Qaeda, ha reclamado la autoría de atentados similares en el pasado, si bien hasta el momento no se ha pronunciado sobre el ataque ejecutado en Damasco.
El Frente al Nusra fue incluido en diciembre por Estados Unidos en la lista de grupos terroristas extranjeros y denunció que esta organización está intentando "secuestrar" la rebelión contra el Gobierno de Bashar al Assad en favor de los intereses de Al Qaeda en Iraq (AQI).
El grupo islamista nació en 2011, al calor de las protestas contra el presidente sirio y se manifestó por primera vez el 23 de enero de 2012 a través de un comunicado del que entonces era su líder, Abu Mohamed al Julani, en el que hizo un llamamiento a la "guerra santa" contra el Gobierno sirio.
Desde mediados de diciembre está liderado por el jordano Mustafá Abdelatif Salé, cuñado del fallecido jefe y fundador de AQI, Abu Musab Zarqawi, que murió en 2006 en un ataque ejecutado por un avión no tripulado estadounidense.
Según las autoridades estadounidenses, el Frente al Nusra ha reivindicado más de 600 ataques en varias ciudades importantes del país que han causado la muerte de numerosas personas inocentes.
Desde entonces, el movimiento salafista-'yihadista' de Jordania ha asegurado en varias ocasiones haber infiltrado a más de 400 combatientes jordanos en Siria para combatir a las fuerzas de seguridad del país, una cantidad que se ha incrementado en las últimas semanas.
A mediados de enero, la Fundación Quilliam, un 'think tank' británico especializado en materia antiterrorista, manifestó que el Frente al Nusra se ha convertido en la facción con mayor efectividad en sus ataques contra las fuerzas de seguridad y ha cifrado en 5.000 el número de combatientes que integran sus filas.
El Gobierno sirio ha argumentado desde el inicio de la revuelta contra Al Assad que los grupos armados que combatían contra las fuerzas de seguridad estaban configurados por células terroristas que reciben el respaldo de países de la región y de Al Qaeda.