S.Leona.- El presidente de Sierra Leona amenaza con imponer el toque de queda si no paran los enfrentamientos

FREETOWN 28 Ago. (EP/AP) -

El presidente de Sierra Leona, Ahmed Tejan Kabaah, amenazó hoy con declarar el estado de emergencia en el país si las luchas entre los dos grupos políticos rivales continúan antes de que se celebre la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el 8 de septiembre.

La Policía usó gases lacrimógenos para dispersar a los partidarios del Gobierno y a los de la oposición cuando se enfrentaron el domingo en la capital, Freetown, mientras que ayer, las autoridades impusieron un toque de queda nocturno en la ciudad de Kono, por incidentes similares, sin que se informase sobre ninguna víctima.

El líder de la oposición, Ernest Bai Koroma, consiguió el 44 por ciento de los votos presidenciales el 11 de agosto, frente al 38 por ciento que obtuvo el candidato del actual partido gobernante, el vicepresidente Solomon Berewa. Koroma no llegó al 55 por ciento necesario para evitar la segunda vuelta, prevista para el 8 de septiembre.

Esta ha sido la primera elección presidencial desde que la misión de paz de la ONU se retirase hace dos años por lo que se ve como una oportunidad para la nación, rica en diamantes, de demostrar que ha sido capaz de establecer un sistema democrático después de una guerra civil que duró diez años, hasta 2002.

Siete candidatos se presentaron para suceder a Kabbah, que no puede presentarse ya que la Constitución del país no permite un tercer mandato de cinco años. "Estos actos de provocación deben parar. El Gobierno empleará todas las medidas legales y constitucionales para mantener la ley y el orden en el país", manifestó Kabbah.

"De ahora en adelante, el Gobierno no dudará un momento en declarar el estado de emergencia si no finalizan los actos de intimidación, de vejaciones y de violencia", añadió. El estado de emergencia debe ser ratificado por dos tercios del Parlamento en un máximo de 14 días.

La convocatoria electoral del 11 de agosto también le dio al partido opositor el control del Parlamento, ya que logró 59 de los 112 escaños, frente al 38 que consiguió el partido en el Gobierno, según indicó la Comisión Electoral.