Sudán.- La CE exige el fin de la violencia en Darfur contra el personal humanitario para que pueda continuar su labor

Actualizado: jueves, 22 febrero 2007 19:31

BRUSELAS, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

El comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, exigió hoy a las partes en conflicto en la región sudanesa de Darfur que cesen la violencia, que no ha hecho más que crecer desde la firma de los acuerdos de paz en mayo de 2006 y que está haciendo que algunas agencias humanitarias se planteen la utilidad de su trabajo en tales condiciones.

En un comunicado, Michel se mostró "gravemente preocupado por la violencia contra la población civil, así como por el deterioro de las condiciones de seguridad de las organizaciones humanitarias". Reclamó a las partes --el Gobierno de Jartum y las milicias árabes-- que "aseguren el respeto del personal y la integridad de las organizaciones humanitarias y les permitan ejercer su misión de asistencia y protección con toda seguridad allí donde existan necesidades de la población civil, tal y como exige el derecho internacional humanitario".

Asimismo, instó a las autoridades de Sudán a que cumplan "efectiva e inmediatamente" la moratoria para Darfur que se acaba de renovar para aligerar los procedimientos administrativos para las organizaciones humanitarias.

Michel lanzó este llamamiento en un momento en que, dijo, la violencia está haciendo el trabajo de estas organizaciones "cada vez más difícil y arriesgado", hasta el punto de que algunas de ellas "se plantean si mantener su presencia en Darfur".

El comisario advirtió que "la reducción de la presencia de las organizaciones humanitarias (en la región) tendría un efecto catastrófico inmediato para las víctimas del conflicto, particularmente para los dos millones de desplazados".

La Comisión señaló que "la situación de seguridad se ha agravado aún más en las últimas semanas" con los "graves incidentes" en las localidades de Gereida y Nyala en diciembre y enero y maltratos y agresiones sexuales a cooperantes. Estos actos se enmarcan en el "recrudecimiento de la violencia * que ha constatado Bruselas contra los cooperantes desde la firma del acuerdo de paz 12. desde entonces, varios trabajadores humanitarios han sido asesinados y se * han multiplicado * los robos de vehículos, un centenar en 2006.