KABUL 6 Ago. (Reuters/EP) -
El líder de los talibán de Afganistán, Mulá Mohamad Omar, ha asegurado en un mensaje difundido este martes que no participarán en las elecciones presidenciales del año próximo y que continuarán luchando hasta que las tropas extranjeras abandonen el país.
"En cuanto al engañoso drama que se oculta detrás del nombre de elecciones 2014, nuestro pueblo no se agotará ni participará", ha declarado Omar, según una traducción proporcionada por el portavoz de los talibán, Zabihulá Muyahid.
Los talibán han rechazado las dos últimas elecciones que se han celebrado en el país, aunque ésta es la primera vez que anuncian públicamente el boicot a las elecciones de 2014.
No se conoce con exactitud cuál es el paradero del líder de los talibán afganos, aunque se cree que vive en Pakistán. Omar no ha hecho ninguna aparición pública ni ha pronunciado ningún discurso desde su huída de Afganistán en 2001 con la llegada de las tropas estadounidenses al país tras los atentados del 11 de septiembre.
En el mensaje, Omar ha afirmado que el objetivo de la oficina talibán en la capital de Qatar, Doha, que cerró a principios de julio, fue el de lograr que las tropas extranjeras abandonaran el país para formar un Gobierno incluyente basado en los "principios islámicos".
"No pensamos en monopolizar el poder", ha asegurado el líder talibán. "Aquellos que verdaderamente aman el Islam y el país y están comprometidos con ambos, quiénes quiera que sean o sea cual sea su etnia o la localización geográfica de la que provengan, esta tierra es suya", ha añadido.
Asimismo, ha señalado que las organizaciones humanitarias deberían sentirse libres para llevar a cabo sus actividades en el país siempre y cuando no "inviten a la gente a sendas no islámicas".
El mensaje llega varios meses después de que un ataque contra unas instalaciones del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Jalalabad acabara con la vida de un guardia no armado y provocara que la organización limitara sus actividades en Afganistán.
Este ataque se atribuyó a los talibán. Sin embargo, los informes de inteligencia recopilados por la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) sugieren que los talibán que atacaron las instalaciones del CICR actuaron sin el permiso de sus superiores.