BUSHEHR (IRÁN), 25 Feb. (Reuters/EP) -
Las autoridades iraníes afirmaron hoy que no han reducido el ritmo de trabajo en su programa nuclear y que van a instalar 50.000 centrifugadoras para enriquecer uranio durante los próximos cinco años, coincidiendo con el ensayo con éxito del funcionamiento de la central nuclear de Bushehr, construida por Rusia.
"Actualmente tenemos 6.000 centrifugadoras funcionando en Natanz e incrementaremos nuestras actividades para instalar más a finales del próximo año", anunció en Bushehr el jefe de la Organización de la Energía Atómica de Irán, Gholamreza Aghazadeh, refiriéndose al próximo año del calendario iraní, que finaliza en marzo de 2010.
Aunque Aghazadeh no precisó cuántas centrifugadoras se habrán instalado hacia esa fecha, dijo que Teherán pretende construir 50.000 en los próximos cinco años. Además, avanzó que el próximo 9 de abril Teherán anunciará un nuevo logro.
"No hemos cambiado el calendario en Natanz, donde tampoco hemos disminuido o acelerado el ritmo de nuestras actividades", manifestó en alusión a la planta de enriquecimiento de uranio situada en la zona central de Irán.
La Agencia Internacional de la Energía Atómica dijo la semana pasada que Irán había reducido la velocidad de ampliación de la central de Natanz pero que había acumulado reservas de combustible nuclear.
PRUEBAS EN BUSHEHR
Por otro lado, el Gobierno iraní anunció este miércoles que ha ensayado con éxito el funcionamiento de la central nuclear de Bushehr, acercándose así un paso más a su puesta en marcha en el marco de un programa nuclear que los países occidentales sospechan que podría tener fines militares.
Las autoridades iraníes explicaron que durante los últimos diez días han realizado con éxito pruebas para inyectar combustible "virtual" en barras, utilizando plomo en lugar de uranio enriquecido. La televisión pública iraní difundió unas imágenes en la que se ve cómo se coloca una barra de combustible dentro del reactor.
"Estamos celebrando el 'prefuncionamiento' de Bushehr, lo que significa que nos estamos acercando al lanzamiento de la central", destacó el jefe de la Organización de la Energía Atómica de Irán, Gholamreza Aghazadeh.
Sergei Kiriyenko, director de la empresa estatal nuclear rusa, Rosatom, elogió las "mejoras significativas" que se han logrado en los últimos meses en la que es la primera planta atómica de Irán para la producción de electricidad. Bushehr se sitúa en el suroeste del país y está rodeada de armas antiaéreas.
Aghazadeh subrayó que ahora ya no debe haber inquietud por la posibilidad de que Rusia opte por no terminar de construir las instalaciones por motivos políticos y adelantó que en los próximos meses se realizarán más pruebas.
Kiriyenko dijo este mes que Moscú pretende poner en funcionamiento el reactor nuclear de Bushehr a finales de este año, si bien su puesta en marcha se ha retrasado en varias ocasiones. Rusia finalizó el año pasado el envío de combustible nuclear a la planta iraní en virtud de un contrato por un valor de unos 1.000 millones de dólares (780,7 millones de euros).
Los países occidentales han criticado la participación de Rusia en el proyecto de Bushehr, pero Moscú mantiene que sus fines son de carácter civil y que no se puede utilizar para fabricar armas atómicas.
Rusia comenzó a enviar combustible nuclear a la central a finales de 2007, lo cual hace innecesario, según Washington y Moscú, que Teherán desarrolle su propio programa de enriquecimiento de uranio. Rusia asegura que Irán le devolverá todas las barras gastadas.
UN IRÁN NUCLEAR
Aghazadeh tuvo unas palabras para Estados Unidos, el país que más firmemente se ha opuesto a las ambiciones atómicas de Irán. "América debería afrontar la realidad y aceptar el vivir con un Irán nuclear. Esta aceptación permitirá a América tener un mejor acceso al mercado (nuclear) iraní", manifestó.
"Nuestro plan para instalar y poner en marcha centrifugadoras no se basa en condiciones políticas. Tenemos un plan y lo llevaremos a cabo", recalcó el jefe de la Organización de la Energía Atómica de Irán.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha mostrado su disposición a dialogar con Irán. No obstante, su Gobierno ha advertido de que la República Islámica será objeto de más sanciones si se niega a poner fin a su programa nuclear. Desde 2006, el Consejo de Seguridad de la ONU ha impuesto a Teherán tres rondas de sanciones.
Irán, el cuarto productor de petróleo del mundo, insiste en que no pretende fabricar armas atómicas y que su único propósito es generar electricidad para poder exportar más petróleo y más gas. El uranio enriquecido puede utilizarse tanto para producir electricidad como para fabricar bombas si se refina mucho más.
El objetivo de Teherán es construir otras plantas de producción de electricidad para 2020 con el fin de crear una red con una capacidad total de 20.000 megavatios.
