MINSK, 26 Ago. (Reuters/EP) -
El Gobierno ucraniano y los separatistas prorrusos han renovado este miércoles los acuerdos suscritos el 12 de febrero en Minsk, comprometiéndose a respetar el alto el fuego para frenar la escalada de violencia en el este.
"Las tres partes del Grupo de Contacto consideran importante alcanzar una tregua sólida ante el inicio del próximo año escolar", ha dicho Martin Saidik, representante de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
"Hay una propuesta para cesar los bombardeos desde el 1 de septiembre. Tenemos la esperanza de que tenga éxito y ponga fin a los enfrentamientos, porque todas las partes han expresado su compromiso con esta idea", ha añadido el líder rebelde Vladislav Deinego.
Mediante los acuerdos de Minsk las partes se comprometieron a una 'hoja de ruta' para rebajar la intensidad del conflicto en el este de Ucrania que incluía una tregua, retirada de tropas y armamento pesado y un canje de prisioneros.
El alto el fuego apenas se ha respetado, según ha constatado la misión de observación de la OSCE. El Gobierno ucraniano ha denunciado recientemente que las fuerzas prorrusas han lanzado los peores ataques desde el principio del conflicto, mientras que el Kremlin ha achacado el repunte de la violencia a las tropas de Kiev.
Más de 6.500 personas han muerto desde que el Gobierno de Petro Poroshenko puso en marcha la 'operación antiterrorista', en abril de 2014, para sofocar la revuelta separatista en las regiones de Donestk y Lugansk.
