BRUSELAS, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini, propuso hoy una serie de iniciativas para reforzar el sistema de asilo de la UE promoviendo una mayor solidaridad entre los Estados miembros a la hora de hacerse cargo de los refugiados y demandantes de asilo.
Frattini destacó que la UE necesita un sistema de asilo común para hacer frente al gran número de peticiones que recibe, que en 2006 fueron más de 181.000. Este sistema, según dijo, debe por un lado proteger a los refugiados que realmente lo necesiten y por el otro evitar las peticiones múltiples de visados que realizan algunas personas en varios Estados miembros para beneficiarse del país que tiene una legislación más favorable (visa shopping). Entre septiembre de 2003 y diciembre de 2005, un 12% de las peticiones de asilo fueron presentadas por personas que ya las habían introducido en otro país de la UE.
Para mejorar y reforzar el sistema de asilo de la UE, el vicepresidente presentó en primer lugar un libro verde de consulta para que todos los interesados contribuyan con sus propuestas. El Ejecutivo comunitario publicará a principios de 2008 un plan de acción con propuestas legislativas con el objetivo de construir un sistema de asilo común en 2010, tal y como se han comprometido los Veintisiete.
Frattini señaló que la normativa comunitaria que determina qué país debe analizar una petición de asilo, el denominado sistema de Dublín, ha funcionado bien en términos generales y no ha provocado un aumento de las solicitudes, excepto en Polonia, Eslovaquia, Lituania, Letonia, Hungría y Portugal. En el resto, las demandas se han reducido hasta un 15%.
No obstante, el vicepresidente señaló que es necesario introducir algunos cambios para "reforzar el principio de solidaridad y el reparto de la carga entre los Estados miembros" e incluso ayudar económicamente a los países que, como Chipre y Malta, sufren una "fuerte presión" de demandantes de asilo. La Comisión estudia que estas ayudas se den también a los países que, como Suecia, están acogiendo a un mayor número de refugiados iraquíes.
Frattini propuso además extender a los refugiados los beneficios de la directiva sobre residentes de larga duración, que se adoptó en 2003 y permite a los inmigrantes legales que hayan tenido un permiso de residencia durante más de 5 años desplazarse y trabajar en cualquier Estado miembro. Este derecho no se reconoce a los refugiados y por ello el vicepresidente pidió "acabar con esta injusticia", lo que permitirá además "aliviar a algunos Estados miembros que acogen a un número enorme de refugiados".
