BRUSELAS, 3 May. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento Europeo decidió hoy aplazar la votación de la norma para recortar hasta un 70% el precio del uso del móvil en el extranjero, que estaba inicialmente prevista para el 10 de mayo, con el objetivo de tener más tiempo para cerrar un acuerdo con la presidencia alemana de la UE, según explicaron fuentes parlamentarias.
De este modo, el reglamento sobre el 'roaming' se votará en pleno en la sesión parlamentaria prevista entre el 21 y el 24 de mayo en Estrasburgo. Este aplazamiento no retrasa de momento la aprobación de la norma, que la Comisión pretende que entre en vigor este mismo verano, puesto que los ministros de Telecomunicaciones de los Veintisiete no tienen previsto pronunciarse hasta el 7 de junio. Las dos instituciones tienen que pactar un texto común.
Los puntos de desacuerdo entre los Veintisiete y el Parlamento siguen siendo dos. En primer lugar, sobre cuál debe ser el tope a las tarifas de 'roaming'. La Eurocámara defiende un coste máximo de 40 céntimos por minuto para las llamadas realizadas y de 15 céntimos por minuto para las llamadas recibidas; mientras que el Consejo quiere que sea de 52 céntimos y 25 céntimos respectivamente. Tampoco hay acuerdo en la tarifa mayorista que se cobran unos operadores a otros, que para los parlamentarios tiene que ser de 23 céntimos y para la presidencia de 32 céntimos.
Otro tema de discrepancia es a quién se aplica este precio, denominado 'tarifa de protección de los consumidores' o 'eurotarifa'. Mientras que tanto la Comisión como el Parlamento defienden que se aplique de manera automática a todos los clientes, el Consejo quiere que beneficie únicamente a aquellos que la pidan explícitamente a su operador.
"Tenemos la impresión de que el Parlamento y el Consejo avanzan el uno hacia el otro y por ello la Comisión es optimista sobre las posibilidades de encontrar un buen resultado", explicó el portavoz de Telecomunicaciones del Ejecutivo comunitario, Martin Selmayr, antes de conocerse el aplazamiento.
Por su parte, el líder de los socialistas en la Eurocámara, Martin Schulz, lanzó un llamamiento a la presidencia alemana para que actúe de manera decidida en este expediente y "no ponga en riesgo una oportunidad histórica de que la UE ayude a los consumidores europeos".
