LISBOA, 18 Oct. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Juan Sanhermelando) -
El primer ministro portugués y presidente de turno de la Unión Europea, José Sócrates, presumió hoy ante el resto de jefes de Estado y de Gobierno comunitarios del "buen clima mediterráneo" de Lisboa, que acogió con tiempo soleado y una temperatura de 25 grados el inicio de la cumbre que tratará de aprobar el nuevo Tratado de Reforma.
Sócrates recibió a los líderes europeos junto con su ministro de Asuntos Exteriores, Luis Amado, a la entrada del Pabellón Atlántico, sede de la cumbre, que se encuentra a las afueras de Lisboa, en el lugar en el que se celebró la exposición universal de 1998, frente al espectacular puente Vasco de Gama que cruza el Tajo.
Entre los primeros en llegar estaban el presidente francés, Nicolas Sarkozy, que entró con gesto sonriente horas después de que el Elíseo anunciara su separación de su mujer Cecilia "de mutuo acuerdo". Tras él apareció la canciller alemana, Ángela Merkel, que se quejó ante Sócrates de que "los socialistas habían discutido demasiado tiempo" durante su reunión previa a la cumbre y ello había retrasado el inicio del Consejo Europeo. "Como sabes, necesitamos discutir", le respondió Sócrates entre sonrisas.
El primer ministro portugués habló durante unos minutos con su homólogo italiano, Romano Prodi, que le escuchaba con gesto serio, pero las cámaras no captaron las palabras de los dos líderes. Italia es el país que plantea el mayor escollo a la aprobación del Tratado de Reforma por su rechazo al reparto de diputados decidido por la Eurocámara para la legislatura 2009-2014.
Al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, Sócrates le recibió hablándole en castellano. "José Luis, es un gran honor poder tenerte aquí", le dijo. "Luego te comentaré", le dijo Zapatero a Sócrates tras una breve conversación y antes de entrar al Pabellón Atlántico, haciendo un gesto con los dedos que parecía querer decir que se refería a que tenían que hablar dos asuntos.
"Le recibimos con carpeta roja y clima mediterráneo", repetía el primer ministro portugués al resto de líderes europeos, algunos de los cuales, como el danés Anders Fogh Rasmussen, se referían con gestos de admiración al buen tiempo de Lisboa. La ministra griega de Asuntos Exteriores, Dora Bakoyannis, elogió a Sócrates por "haber organizado tan bien el tiempo".
Las imágenes transmitidas por televisión del inicio de la cumbre mostraron una conversación entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el Alto Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana, a la que se incorporó el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos. También se pudo ver un diálogo entre Sarkozy y Merkel.
