MADRID, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha descrito este viernes como "extremas" las condiciones de vida en el campamento de desplazados de Rukban, ubicado cerca de la frontera con Jordania.
El organismo finalizó esta semana la entrega de un convoy de ayuda humanitaria junto a la Media Luna Roja Árabe Siria y otras agencias de la ONU, el primero que llega al lugar desde territorio sirio. En el campamento viven cerca de 50.000 personas, la mayoría mujeres y niños.
UNICEF ha detallado que ha enviado 21 camiones de ayuda humanitaria como parte de convoy y ha dado apoyo con vacunas, equipos para mantener la cadena de frío y suministros médicos para inmunizar a 10.000 niños contra el sarampión, la poliomielitis y otras enfermedades.
Así, ha dicho que se ha tratado de "una de las operaciones humanitarias más complejas dentro de Siria", con más de 75 camiones y cien trabajadores humanitarios y de logística dando apoyo.
"Los niños y las mujeres en Rukban han tenido un acceso extremadamente limitado a los servicios de salud por el empeoramiento de las condiciones", ha indicado Fran Equiza, representante de UNICEF en Siria.
"UNICEF siempre ha abogado con todas las partes importantes implicadas para incluir a los vacunadores en el convoy y poder así proteger a los niños contra enfermedades que amenazan sus vidas", ha manifestado.
Por su parte, el doctor Husam Eddine Baradee, Oficial de Salud y Nutrición de UNICEF que acompañó al convoy, ha resaltado que "la mayoría de los niños menores de cinco años nunca habían sido vacunados".
"A pesar de los desafíos, pudimos vacunar a 5.100 niños en los pocos días que hemos tenido acceso al campamento. Sin embargo, necesitamos un acceso sostenido en el tiempo, ya que miles de niños aún necesitan ser vacunados", ha explicado.
El personal de UNICEF ha detallado que muchos de los residentes en Rukban han tenido que sobrevivir desde hace tiempo con una sola comida al día. "Casi no como nada porque mi prioridad es alimentar a mis hijos. Me mareo cuando amamanto en estos días", ha relatado una madre contactada por el organismo.
Por ello, ha pedido a todas las partes involucradas en el conflicto que permitan a los desplazados regresar de forma voluntaria a sus hogares o a un lugar de su elección, al tiempo que ha resaltado que este proceso debe garantizar su "seguridad y dignidad".
Asimismo, ha reclamado que se permita garantizar "un acceso humanitario sostenido para poder prestar ayuda a todos los niños necesitados en Rukban y en otros lugares en Siria".
JORDANIA APOYA EL DESMANTELAMIENTO
El Gobierno de Jordania afirmó el jueves que está en conversaciones con Estados Unidos y Rusia para el desmantelamiento del campamento y expresó su respaldo al plan de Moscú para coordinar el retorno voluntario de los residentes en Rukban en sus viviendas en el este de Siria, una vez que la zona ha sido recuperada por el Ejército.
Fuentes de Inteligencia citadas por la agencia británica de noticias Reuters han señalado que el plan ruso contempla negociar con líderes tribales sirios y antiguos rebeldes respaldados por Occidente para dar un paso seguro a los desplazados hacia las zonas controladas por los rebeldes en Idlib o sus viviendas en las áreas en manos del Estado sirio.
El campamento de Rukban está cerca de la base militar estadounidense en Tanf, en una zona desértica en la que convergen la frontera de Siria con las de Jordania e Irak. Se encuentra dentro de una zona de "distensión" creada por las fuerzas norteamericanas.
El régimen sirio acusa a las fuerzas de Estados Unidos de estar ocupando su territorio y de estar dando refugio a fuerzas rebeldes que combaten al Gobierno de Damasco.
El campamento de Rukban sufrió en octubre un asedio desde territorio sirio por parte del Ejército de Damasco, con el objetivo de impedir que traficantes y comerciantes entregaran alimentos para los refugiados.
En los últimos tres años, decenas de miles de personas han huido desde zonas controladas por Estado Islámico en Siria para refugiarse en Rukban y evitar ser alcanzados por los bombardeos rusos y de Estados Unidos contra los territorios bajo dominio del grupo terrorista.
