MADRID 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, el cardenal Ignace Moussa I Daoud, recordó hoy "la absoluta y urgente necesidad" de sostener "de todos los modos posibles" a aquella "antigua y siempre joven porción de la Iglesia que vive en Tierra Santa", informó el Vaticano.
En la habitual misiva que todos los años envía en Cuaresma la Congregación para la Iglesias Orientales a "todos" los pastores de la Iglesia, el cardenal les pide que sostengan "de modo concreto las necesidades" de "los hermanos y las hermanas de aquella Tierra, y de manera particular invocando para ellos la paz que viene de lo Alto".
Benedicto XVI, asegura el purpurado, recordó este compromiso durante su visita a Turquía el pasado mes de noviembre, cuando pidió "paz para Jerusalén y para el mundo entero". "Resulta por tanto un deber para todos los católicos del mundo el acompañar con la oración y la solidaridad, también económica, a las comunidades cristianas de aquella Tierra bendita, que, entre mil dificultades, ofrecen cotidianamente y en silencio un auténtico testimonio del Evangelio".
Asimismo, recuerda que la primera colecta en favor de Tierra Santa se remonta al Papa Martín V, que estableció en 1421 las normas sobre la recaudación de las ofertas para tal fin y que la misma tuvo carácter pontificio y fue confirmada por diversos Pontífices.
"La Congregación para las Iglesias Orientales es heredera de esta solicitud y se siente siempre solidaria con los cristianos de Tierra Santa y de toda la región del Oriente Próximo donde la crisis política y económica no está todavía resuelta y donde se registran cada día sufrimientos inauditos", insiste.
El cardenal concluye la carta agradeciendo en nombre de su dicasterio, "del Patriarcado Latino, de la Custodia y de todos los institutos y organismos" que operan en Tierra Santa, "todo lo que las Iglesias particulares de todo el mundo continuarán haciendo de cara al futuro". "Pero es el Santo Padre quien envía el más sentido agradecimiento, al que une la oración y la bendición para todas las Iglesias y para todos los benefactores de la Tierra del Señor", concluye.