BRUSELAS, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha confiado este viernes en que el Gobierno británico haga prueba de "flexibilidad y pragmatismo" y cumpla con las disposiciones del protocolo para Irlanda del Norte acordado entre Londres y la UE como parte del acuerdo del Brexit.
"La Comisión ha demostrado una enorme flexibilidad, pragmatismo y credibilidad en los últimos años y semanas y no puedo imaginar que nuestros amigos británicos no vayan a mostrar la misma flexibilidad y pragmatismo", ha razonado la jefa del Ejecutivo comunitario, en una rueda de prensa en Dublín acompañada por el primer ministro irlandés, Micheal Martin.
El Ejecutivo comunitario mantiene un expediente sancionador contra Reino Unido por incumplir el protocolo irlandés negociado con la UE para evitar la vuelta a una frontera "dura" en el Úlster, aunque el procedimiento ha quedado aparcado hasta septiembre para tratar de dar margen a la negociación entre Bruselas y Londres para una solución amistosa.
En este contexto, Von der Leyen ha insistido en que para el bloque europeo el protocolo "es la única solución" para mitigar el impacto del Brexit en la región y proteger los Acuerdos de paz de Viernes Santo sin dañar el Mercado Común.
"Desde luego no es el problema", ha remachado, para insistir después en que para asegurar que se dan estos objetivos es necesario poner en práctica las disposiciones del protocolo.
El acuerdo de divorcio que sentó las bases de la ruptura de los británicos con sus Veintisiete socios incluye un protocolo específico para Irlanda del Norte, ya que esta provincia se mantiene dentro de la Unión Aduanera europea a diferencia del resto de Reino Unido.
Para evitar distorsiones en el mercado común porque se usara Irlanda del Norte como "la puerta de atrás" por la que pasar productos que esquivaran las reglas comunes se acordó que Reino Unido realizaría controles aduaneros en los envíos de ciertas mercancías, por ejemplo la carne refrigerada, a su paso desde Gran Bretaña a la provincia irlandesa.
Sin embargo, el Gobierno de Boris Johnson decidió después de manera unilateral retrasar la aplicación del protocolo, algo que irritó a los 27 por considerar que es una violación del Derecho europeo e internacional al incumplir un Tratado bilateral acordado y aprobado por ambas partes.
