PEKÍN, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de China, Xi Jinping, ha sorprendido este martes a los residentes de un barrio de la capital, Pekín, donde desde el pasado viernes está activada la alerta naranja por contaminación, con una aparición pública sin previo aviso, según ha informado el diario chino 'South China Morning Post'.
Es la segunda vez que el presidente se salta el protocolo, sólo dos meses después de presentarse en un restaurante de cocina tradicional china en el que recogió su bandeja y pagó su propia comida. Tras su visita, el local se ha convertido en un atractivo turístico de la capital.
Las redes sociales se han revolucionado con la visita de Xi al céntrico barrio de Pekín en un día en que la contaminación ha alcanzado niveles muy elevados.
El pasado viernes, Pekín declaró por primera vez la alerta naranja por contaminación, tras comenzar la jornada con una tasa de 378 PM2,5 --partículas que miden menos de 2,5 micrómetros y que son las más nocivas en la contaminación aérea--. La Agencia de Protección Ambiental estadounidense considera que cualquier nivel de estas partículas superior a 300 podría ser peligroso.
Este martes a las 12.00 horas, el nivel de contaminación en la capital había alcanzado los 432, según el Centro de Supervisión y Protección Medioambiental.
A pesar de la intensa niebla, Xi ha visitado dos patios de la céntrica calle Yuer Hutong, donde ha preguntado a los residentes acerca de sus condiciones de vida y con quienes se ha sacado diferentes fotos.
¿VISITA ESPONTÁNEA?
Aunque la aparición no había sido anunciada, la visita de Xi a los residentes del centro de la capital podría no haber sido espontánea, ya que al menos dos cadenas de televisión se encontraban en el lugar cuando el presidente hizo su aparición.
El área que ha visitado el presidente es una céntrica zona donde se ubican decenas de restaurantes de comida callejera tradicionales y pequeñas tiendas de productos artesanos.
"¿Hará que el apestoso tofu o la crema de doble capa (típica comida cantonesa) sean famosos esta vez?", ha escrito un internauta en la red de social Weibo, similar a Twitter, en referencia a su anterior visita.
Asimismo, el propietario de uno de los restaurantes de la zona, Chen Heng, ya se había quejado días antes de la visita del presidente de que varios agentes de la Policía habían estado comprobando la calle "como perros rabiosos".
