MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -
El balance de muertos por el derrumbe del Rana Plaza cerca de Dacca la semana pasada se eleva ya a 509, tras el hallazgo en las últimas horas de otros 63 cadáveres entre la montaña de escombros a que quedó reducido el edificio, según informa el diario local 'Daily Star'.
Las operaciones de búsqueda continúan este viernes por décimo día consecutivo, ya que bajo los escombros todavía quedan decenas de desaparecidos, si bien aún no está claro el número exacto ya que las autoridades no han recibido aún el listado de los trabajadores de las dos fábricas que habían acudido a trabajar el día de la tragedia.
Por otra parte, según informa el diario, el propietario del edificio,
Sohel Rana, ha reconocido que construyó de forma ilegal las tres plantes superiores del mismo, ya que solo tenía permiso para seis. Además, tanto él como su padre, quien también se encuentra detenido, han admitido que no controlaron la calidad de la construcción y de los materiales empleados.
Además, según ha indicado uno de los investigadores del caso, ambos han revelado los nombres de tres ingenieros que participaron en la construcción.
Precisamente, la Policía detuvo este jueves a uno de esos ingenieros, Abdur Razzak, quien visitó el edificio después de que aparecieran grietas el pasado 23 de abril y presuntamente aseguró que estas no planteaban ningún peligro. Este hecho hizo que los propietarios de dos de las cinco fábricas textiles ordenaran a sus empleados ir a trabajar el día de la tragedia.
Además, este ingeniero había sido contratado como consultor para la novena planta, que estaba en construcción en el momento del derrumbe. "Hemos detenido a Razzak en Savar. Dio un certificado falso sobre el edificio que le pidió Rana, con quien tenía una relación cercana", ha explicado el comisario de Policía de Dacca, Habibur Rahman.
