Alrededor de 174.000 yibutienses están llamados a las urnas para elegir a sus representantes en el Parlamento

MADRID 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

Alrededor de 174.000 yibutienses están llamados a las urnas este viernes en el marco de unas elecciones parlamentarias en la que deberán elegir a un total de 65 miembros del organismo, unos comicios que, por primera vez, introducen el concepto de proporcionalidad, si bien estará limitada al 20 por ciento.

El partido del presidente, Ismael Omar Guelleh, la Unión por la Mayoría Presidencial (UMP) parte como favorita, si bien la Unión por la Salud Nacional (USN), que agrupa a varias formaciones opositoras, ha cogido fuerza en las últimas semanas.

En este sentido, la proporcionalidad podría jugar un importante papel, ya que, hasta ahora, el escrutinio mayoritario ha permitido a la UMP hacerse con la práctica totalidad de los 65 escaños del Parlamento. Por ello, es también la primera vez que la oposición ha renunciado a boicotear los comicios.

Asimismo, y como una muestra de unidad que tampoco tenía precedentes, las formaciones opositoras decidieron dejar de lado sus diferencias y conformar una coalición para intentar sacar provecho de la proporcionalidad y arrebatar el poder de Guelleh a través de un programa conjunto.

Durante la campaña, la USN ha prometido restaurar los Derechos Humanos y las libertades individuales y colectivas, promover la democracia y combatir el tribalismo, la corrupción y el nepotismo en el país, según ha informado la emisora Radio France International.

Tanto la UMP como la USN presentarán candidatos en todas las circunscripciones del país, aunque el destino de los comicios se juega en la capital, Yibuti, que compatibiliza un total de 35 escaños.

Pese a todo, existen dudas en torno a la justicia y transparencia de los comicios. La oposición, que no cuenta con ningún representante en la Comisión Electoral y que, por tanto, no ha obtenido ninguna copia del fichero electoral, ya ha mostrado sus dudas al respecto.

Asimismo, la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y su organización miembro, la Liga Yibutiense de Derechos Humanos (LDDH), han expresado su preocupación por el clima político y de seguridad existente en el país durante la campaña electoral.

Ambas organizaciones han acusado a Guelleh de lanzar una campaña contra la oposición y han solicitado que los comicios sean transparentes y justos, así como que permitan a la población acudir a las urnas sin temor a las represalias.

En este sentido, el presidente de la LDDH, Abdillahi Zakaria, ha denunciado actos de intimidación por parte de la Policía y ha subrayado que entre cinco y diez dirigentes de la USN han sido detenidos.