HARARE, 1 Jul. (EP/AP) -
Inspectores del gobierno y policía secreta allanaron el domingo comercios y supermercados para hacer cumplir las rebajas de precios de productos de primera necesidad, en un país cuya inflación oficial es del 4.500%. Centenares de compradores se abalanzaron sobre los estantes de los negocios poniendo "gangas" a la venta, al acrecentarse el caos en Zimbabue a raíz de la difícil situación económica.
Gerentes de negocios intentaron limitar las adquisiciones a dos jabones, alimentos, leche y otros productos de primera necesidad, pero los inspectores ordenaron a los operadores que despejaran rápidamente los comercios a fin de hacer salir a las multitudes que se peleaban por arrebatar los productos.
La prensa oficial informó el domingo que al menos 20 ejecutivos de empresas habían sido detenidos durante el fin de semana por acaparamiento de productos, por elevar los precios sin autorización, y por violar las normas del gobierno.
El pan y la harina de maíz desaparecieron el sábado de la mayoría de los comercios de comestibles, mientras los dueños de los negocios acataban la orden del gobierno de reducir a la mitad los precios de los productos esenciales.
Pero inspectores estatales ordenaron a los comerciantes reducir los precios de todos los productos perecederos, no sólo de aquellos que ordenó el Gobierno, denunció un exasperado gerente.
"Pronto no quedará nada en los estantes, y tendremos que cerrar", dijo el gerente a las personas que se aglomeraban a la entrada de su comercio.
El martes, el Gobierno comenzó un programa para frenar el vertigionoso alza de los precios de alimentos y otros productos básicos. Entre sus decisiones figuró la reducción del precio de la gasolina en un 70%. Cuando el combustible se agotó, las estaciones de servicio no recibieron más abastecimientos.
Se trata de la peor crisis económica que sufre Zimbabue desde su independencia en 1980. La inflación oficial es del 4.500%, la mayor del mundo. Sin embargo, los expertos estiman que la inflación real se acerca al 9.000%.
