Afectados por caída de muro en Las Palmas hace 3 años que se saldó con 3 muertos, piden rapidez para arreglar situación

Actualizado: lunes, 23 febrero 2009 14:07

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los afectados por la caída de un muro hace tres años en Las Palmas de Gran Canaria, suceso que se saldó con tres fallecidos de una misma familia, han solicitado hoy a las administraciones públicas celeridad para arreglar su situación. Este fue el principal mensaje que lanzó hoy el portavoz de los vecinos afectados, Rafael Morales.

El 23 de febrero de 2006 la caída de un muro en la calle Pancho Guerra de Las Palmas de Gran Canaria arrasó las viviendas de diez familias y causó la muerte de tres personas, hecho que han querido recordar hoy los sobrevivientes con un emotivo homenaje en el que han recordado a los fallecidos, así como con la lectura de un manifiesto en el que han solicitado celeridad en la burocracia de las administraciones para que los afectados puedan volver al que hasta hace tres años fue su lugar de residencia.

En cuanto a la propuesta urbanística que ahora realizan los vecinos, Morales explicó, en declaraciones a los medios, que se centraría en la construcción de casas de cinco plantas --antes eran de cuatro--, similares a las que había hasta que se derribó el muro, con el fin de que la estructura de los edificios "haga de pantalla para evitar que haya ningún muro detrás" aunque afirmó que si existe un muro de contención, "sea lo más corto posible".

Añadió que si antes había diez viviendas, ahora desconocen cuántas podrían realizarse, ya que lo que han planificado es una propuesta, aún no existe un proyecto de lo que se llevaría a cabo. "No lo sabemos porque no hemos podido concretar todavía qué es lo que nos dejan hacer, no lo sabemos", apostilló.

Asimismo, señaló que la propuesta de los vecinos está incluida en el Plan de General de Ordenación Urbana de la capital grancanaria "en lugar de utilizar otras vías" porque el consistorio "entiende que es mejor así". Sin embargo, mostró su sorpresa por la "lentitud" de dicho plan porque "está permanentemente retrasándose".

Respecto a la comisión de técnicos que se conformó tras el suceso para valorar las causas de los sucedido, explicó que fueron tres los equipos que analizaron la situación encargados por el juzgado, el Ayuntamiento y los vecinos. En este sentido, apuntó que finalmente "hay una gran coincidencia" entre los tres, ya que coinciden en las dos causas que motivaron el derribo del muro.

Agregó que, por un lado, la caída del muro fue que éste estaba "mal hecho, mal calculado, mal estudiado" por los técnicos que lo diseñaron y, por otro lado, "el aporte continuo de agua del Parque Frío y, al no existir un plan de drenaje, hizo que todo el agua se acumulara en el muro, por decirlo de alguna forma, parecía una presa --el muro-- y el agua pudrió la estructura" del mismo.

Para Morales lo que le ocurrió a ellos hace tres años "es un caso muy atípico", ya que "no ha pasado en España, no ha pasado ni en Europa que una construcción, así, tan moderna se venga abajo". Además, el portavoz de los vecinos destacó que el muro "no avisó" antes de caerse y "normalmente todas las obras siempre dan aviso con ruidos, se desquebraja. En este caso no, fue un desplome absolutamente de improviso, súbito e ilógico".

De todos modos, afirmó que unos diez días antes del desplome del muro, en la última de las casas afectadas, había agua y el vecino avisó a los que fallecieron "pensando que habían dejado algún grifo abierto, alguna cañería y quedaron en avisar a un fontanero para que averiguara la causa de ese agua tan abundante que había en el suelo. Lo que los fontaneros investigaban, no encontraban nada, se cayó", siendo ese agua la que acumulaba el muro.

PAGANDO LAS HIPOTECAS

En cuanto a la situación de cada una de estas familias, Morales indicó que ahora unos viven de alquiler, otros con familiares o en sus segundas viviendas. "Lo que nosotros queremos es volver a nuestra calle, a nuestra casa, a nuestro barrio. Este es nuestro solar, esta es nuestra hipoteca", apuntilló.

Morales señaló que continúan pagando las hipotecas de sus casas derribadas. "Fuimos a los bancos a intentar decirles, mire estamos en una situación económica límite y nos gustaría aplazar un poco el capital y pagar los intereses para que durante dos ó tres años nos ayuden con el tema económico con el que nos encontramos y la respuesta fue unánime, no, y como no pueden amenazarnos con las viviendas porque no hay, nos amenazaron con embargar las nóminas", apuntó.

Respecto a la situación judicial explicó que todo continúa en los juzgados y están a la espera de una primera sentencia. Añadió que se trata de un pleito "complejo" pero esperan que cuando se pronuncie la justicia sea con una "sentencia firme y que se pueda ejecutar" para que los afectados puedan ser indemnizados como les "corresponde". De todos modos, reconoció que lo "tienen complicado porque hay una serie de plazos que han caducado, los técnicos que han fallecido, la promotora que ya no existe porque en su momento hizo la obra y se disolvió. Hay una complejidad impresionante".

Respecto a las obras en el antiguo estadio insular, que previsiblemente no esperará a la aprobación del plan urbanístico sino que se realizarán a través de otras vías, aseguró no podérselo creer, ya que aunque para la ciudad "es muy importante" la rehabilitación de esa parte de la ciudad --la del estadio--, no se entiende que eso pueda ir por una vía diferente y la edificación de sus casas no.

MANIFIESTO

Por otro lado, en la lectura que Morales hizo del manifiesto de los vecinos y que se vio interrumpido, en ocasiones, por aplausos de los afectados que visitaron lo que quedaba de su casa, explicó que en la actualidad la normativa vigente le impediría levantar las casas que antes existían y que fueron derribadas, de ahí que calificaron de "muy complicada" su situación actual.

De todos modos, los afectados han reconocido los esfuerzos de las áreas de Urbanismo y Planeamiento del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria aunque reconocieron que no ven los "avances ni respuestas". "Es algo que nos está pasando una factura emocional adicional con la que cada vez tenemos más dificultades de convivir", apuntaron en el manifiesto.

Asimismo, aseguraron que el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, y el consejero canario de Política Territorial, Juan Ramón Hernández, también les ha manifestado su compromiso de "agilizar la tramitación" del expediente de los afectados, una vez el Ayuntamiento de la capital grancanaria lo remita al Ejecutivo autonómico y dentro del Plan general de Ordenación Urbana de la ciudad.

"Ayuntamiento y la Consejería de Política Territorial --del Gobierno canario-- son las únicas que mantienen su compromiso de ayuda para con nosotros. El resto --y las tocamos a todas-- y pese a los numerosos intentos, todo quedó en palabras", recoge el documento.